La sincronía del agua

Entrevista con la ondina yucateca Karem Achach
Foto: Luis Andrade Castillo

“Un centauro deportivo”, así define en tres palabras la disciplina en la cual se desempeñó por más de dos décadas, una actividad en la que concurren, a partes iguales, fuerza, técnica, flexibilidad y elegancia. Alfonso Reyes afirmó que el ensayo es el centauro de los géneros literarios ya que abreva de la poesía, la crónica y la novela, y lo mismo ocurre en el nado sincronizado, deporte que es una asombrosa amalgama de gimnasia, natación, danza y buceo.

Por supuesto, un deporte mítico requiere de seres fabulosos, casi ficticios, capaces de realizar bajo la superficie del agua lo que otras personas no podemos hacer ni siquiera sobre la comodidad y seguridad de la corteza terrestre. En la mitología se conocían con diversos términos –náyades, sirenas, ninfas– a los seres de agua que habitaban los océanos, estanques y lagos. Hoy, una de esas palabras, ondinas, sirve para designar a las deportistas que realizan sus rutinas, ejercicios y combinaciones en el cielo reflejado de una alberca olímpica.

Y así como en la cultura griega tienen a las Nereidas; en Yucatán, en la península, tenemos a Karem Achach, una deportista que hasta en su nombre cumple con una de las tradiciones más emblemáticas de esta tierra, la de ponerle la letra “m” a las palabras que terminan en “n”. Eso no es todo, además nos comenta que sus papás querían ponerle una “h” intermedia, así, Kahrem, sólo que el funcionario del Registro Civil hizo también invisible a la única consonante muda de nuestro abecedario, evitándole así futuros dolores de cabeza administrativos.

Lo primero que le llamó la atención a Karem de la natación artística fue el hecho de poder escuchar la música en un ambiente líquido. Así, se podría decir que el deporte le entró por los ojos y por los oídos. “Yo llegué a una instalación gubernamental deportiva, el estadio Salvador Alvarado, siendo una niña, y desde ese momento me hipnotizó el hecho de realizar acrobacias y bailar en el agua. Me di cuenta que no necesitaba tocar fondo para poder controlar mi cuerpo en un espacio diferente”. Lo cual, además de una enseñanza deportiva, es una valiosa lección de vida.

Desde temprana edad formó parte de representativos estatales, con ejercicios diarios de entre tres y cuatro horas para mejorar la confección de los movimientos e ir brindando mayor complejidad a las transiciones. La constancia y los buenos resultados le permitieron formar, años después, parte de la selección nacional, lo que también significó duplicar las horas de entrenamiento: cuatro horas por la mañana y el mismo número por la tarde en rutinas de fuerza, acrobacia y flexibilidad, para así manejar con pericia los cuatro elementos de la naturaleza. Gimnasta en la tierra y escafandra en el agua, que mezcla el aire y el fuego en sus rutinas.

Concentración y fuerza

El escritor japonés Haruki Murakami, en un libro en el que reflexionaba sobre lo que pasaba por su cabeza al correr diariamente unos cuantos kilómetros, afirmaba: “Cuando estoy triste, pienso un poco en la tristeza. Cuando estoy alegre, pienso un poco en la alegría. Pensamientos relativamente sencillos para una actividad simple en la que basta con mantener una posición erguida y coordinar una sucesión alternada de zancadas. En el nado sincronizado, la concentración es más compleja, ya que hay una serie de figuras y elementos obligatorios, que además se deben realizar en un determinado tiempo y en secuencias previamente establecidas.

“Antes de entrar a la alberca, visualizo toda la rutina y voy repasando, una a una, todas las posiciones. Contengo el nerviosismo. En cuanto toco el agua, concentración pura para no perder la cuenta de la música. Me pierdo en el agua y busco la armonía de manera individual, con el dueto o con el equipo”, comenta Karem Achach.

A base de concentración y fuerza, la nadadora yucateca formó parte de la delegación mexicana que nos representó en Juegos Centroamericanos y del Caribe, Juegos Panamericanos, Campeonatos Mundiales de Natación y Juegos Olímpicos. Una época dorada para el nado sincronizado en el país: se cosechó una medalla en los Juegos Panamericanos de 2015 y, también, se obtuvo la calificación a una final olímpica después de mucho tiempo.

“Así como disfruté en igual medida cada entrenamiento y formar parte de la delegación de las Olimpiadas, lo mismo me sucedía en cada modalidad de nado: ya fuera individual, en dueto o con el equipo, siempre había algo que aprender. En la modalidad de dueto, aprendes de la técnica y de la experiencia de tu pareja. Y en equipo, aprendes de cada compañera, de cada cabeza, y trabajas en colectivo”.

En paralelo a la alberca

“Comencé a estudiar la licenciatura en arquitectura, pero tuve que dejar la carrera después del primer semestre, cuando tuve que decidir entre continuar los estudios o irme a formar parte de la selección. En ese momento, le di prioridad al deporte, porque no sabía si el día de mañana me iban a convocar nuevamente”.

No obstante, siempre tuvo claro que había que seguirse formando para las situaciones y circunstancias por arriba del nivel del mar. Así que eligió una carrera ejecutiva y ahora es Licenciada en Administración de Negocios. Aunque no descarta retomar en algún momento los estudios truncos de arquitectura. Aguantar la respiración le ha dado madurez y paciencia a la hora de tomar decisiones.

Así, en 2018, tomó la decisión de retirarse del deporte de alto rendimiento y abrir nuevos caminos personales y profesionales. “2018 fue mi mejor año, incluso obtuve el Mérito Deportivo otorgado por el Gobierno del Estado y comenzaba la preparación intensiva para los Juegos Olímpicos de Tokio. No me quedé con la espinita clavada de nada. Me retiré porque ya había aportado lo que tenía que aportar a la disciplina”.

Apenas al salir de la alberca se introdujo en otras aguas, acaso más turbulentas, como lo es el servicio público. Actualmente, es regidora en el Ayuntamiento de Mérida y forma parte de las comisiones de Juventud y Deporte, Salud y Ecología e Igualdad de Género, entre otras.

“Estoy muy contenta con la oportunidad de aportar desde mi experiencia para fomentar el deporte en Mérida. Se han puesto en marcha muchísimas acciones para fomentar la activación física, al igual que deportes como el boxeo, el karate y, por supuesto, la natación. Pero hay que seguir fomentando el nado sincronizado y motivar a las nuevas generaciones a través del contacto directo, sobre todo ahora que hay que trasladar la dinámica del ejercicio a los hogares y adaptarla a las medidas sanitarias de la nueva normalidad.”

“Estoy en una etapa de mi vida en la que soy como una esponja que quiere aprender, motivar, crecer. En el mediano plazo mi objetivo es seguir emprendiendo y hacer algo propio”.

A sus 29 años, la ex deportista y funcionaria yucateca, más que embelesarse con su reflejo en el agua, como le sucedió a Narciso, tiene claro que mantenerse en movimiento es lo que hace posible la sincronía en el agua y el equilibrio social.

[email protected]

Edición: Emilio Gómez


Lo más reciente

UADY y el MIT diseñan herramientas para niños con discapacidad en Progreso y Tekax

Al menos 45 alumnos de escuelas de educación especial han sido beneficiados

Rodrigo Medina

UADY y el MIT diseñan herramientas para niños con discapacidad en Progreso y Tekax

Responsable de Hamás dice que grupo dejaría las armas si se creara un estado palestino independiente

El conjunto insurgente podría convertirse en un partido político

Ap

Responsable de Hamás dice que grupo dejaría las armas si se creara un estado palestino independiente

¿Cuándo será la última conferencia mañanera de AMLO?

El mandatario informa sobre actos públicos del fin de su sexenio

La Jornada Maya

¿Cuándo será la última conferencia mañanera de AMLO?

AMLO pide a FGR aclarar declaraciones sobre producción de fentanilo en México

Alto funcionario de la dependencia dijo el país ''es campeón'' fabricando la sustancia; son dichos ''alarmistas'', comentó el presidente

La Jornada

AMLO pide a FGR aclarar declaraciones sobre producción de fentanilo en México