El Ayuntamiento del Ticul informó a través de sus redes sociales del despido de uno de sus trabajadores, que en días pasados celebró la boda de su hija sin respetar el uso de cubrebocas y la sana distancia.
“En días pasados se suscitó una situación de conocimiento, no solo local, sino nacional, donde se presentó una situación con una persona que forma parte de la administración pública municipal”, mencionan.
La comuna ticuleña aclaró que se trató de un acto particular bajo las disposiciones eclesiásticas; mas como funcionarios públicos deben apegarse a la ley y reglamentos “teniendo plena conciencia de la situación de salud que se vive en el mundo”.
El comunicado emitido por el municipio que encabeza Rafael Montalvo Mata -de extracción panista- señala que las autoridades no pueden poner en riesgo la salud de ningún área de trabajo y menos a la comunidad.
“Es por lo anterior que después de una minuciosa revisión y análisis del caso, se procede a dar por concluida la relación laboral entre el trabajador y esta administración bajo los términos de ley”, concluyen.
Edición: Emilio Gómez
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