Como se anunció previamente, el grito de independencia en la capital yucateca se limitó al acto protocolario. Asistieron las autoridades pertinentes -encabezadas Mauricio Vila- y en punto de las 23:05 el mandatario salió al balcón del Palacio de Gobierno a vitorear a los héroes de aquella batalla, que el día de hoy cumple 210 años.
Es un hecho inédito que un gobernador grite “¡viva México!” con el Centro Histórico vacío. Como se recordará, la totalidad de restaurantes del estado permanecerán cerrados hoy y mañana, como parte del pacto de reactivación económica; y la restricción a la movilidad inicia a las 22:30.
No hubo mariachis; ni fuegos artificiales. Tampoco conciertos, ni bailes para conmemorar el aniversario de la independencia de México.
Además del titular del ejecutivo, al Salón de la Historia se apersonó su esposa, María Eugenia Ortiz Abraham; la secretaria general de Gobierno, María Fritz Sierra; el presidente del Tribunal Superior de Justicia, Ricardo Ávila Heredia; el alcalde de Mérida, Renán Barrera Concha y el titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Luis Felipe Saidén Ojeda.
Edición: Enrique Álvarez
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