Gloria Serrano
La Jornada Maya


13 de septiembre, 2015

En su libro “El sentido del viaje” (Junta de Castilla y León, 2014), la escritora Patricia Almarcegui señala que “el Otro se puede definir como lo que el viajero encuentra fuera de la sociedad y le resulta extraño. Puesto que el hombre se realiza en la dimensión social, forma un solo individual y cultural con él a partir del cual establece un diálogo creativo. No hay nada del Otro que no tenga que ver con la autorreflexión del viajero”. Este diálogo creativo que surge del periplo hacia la diferencia, que brota de la lejanía, de la otredad y del contraste, es precisamente lo que un joven artista yucateco está por experimentar. Su nombre es [b]José Fernández Levy[/b], Licenciado en Artes Visuales egresado de la Escuela Superior de Artes de Yucatán (ESAY) y actualmente colaborador de la Fundación Gruber Jez, bajo la dirección de la maestra Gerda Gruber.

En 2010, José recibió el Premio de Adquisición en el XXX Encuentro Nacional de Arte Joven y al año siguiente, obtuvo mención honorífica en la V Bienal Nacional de Artes Visuales de Yucatán y la beca excelencia artística del Gobierno del Estado. En 2012 fue becario del Programa Jóvenes Creadores del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (FONCA) con el proyecto de escultura monumental “El fantasma de la bestia” y dos años más tarde, en 2014, obtuvo una beca del Programa de Estímulos a la Creación y Desarrollo Artístico (PECDA) para realizar el proyecto de instalación “Bancas de parque”, además de haber sido seleccionado para participar en el Festival A-part en Les Alpilles, Francia. Ahora, gracias al Programa de becas para estudios en el extranjero FONCA-CONACYT, el apoyo del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) para manutención, la beca Santander Scholarship para estudiantes considerados “fuerza positiva” en el desarrollo de la economía global y el respaldo de SEDECULTA, José cursará la Maestría en Fine Art (MA Programme in Fine Art), de la Universidad de Kent en Inglaterra, considerada una de las 10 mejores del Reino Unido y una de las 20 que aparecen incluidas en el Guardian University Guide 2015.

Sin embargo, como él mismo comenta, el zigzagueante camino para llegar a esta universidad europea fundada en 1965 y que hoy goza de una sólida tradición educativa, de ninguna manera resultó un paseo por la Plaza Grande. Así lo demuestra la exposición [b]“Después de ti no hay nada”[/b], una selección del trabajo realizado durante los dos últimos años por este artista graduado con honores. La Jornada Maya acudió a las instalaciones de la ESAY para conocer la obra de José, así como su particular vivencia del proceso que llevó a cabo para cursar estudios de posgrado fuera del país. Esto fue lo que nos dijo:

“La temática de esta exposición se basa en una historia ficticia, una relación sentimental que termina y cómo esto lleva a visualizar el paisaje yucateco desde otra perspectiva. Es un poco una nostalgia, unos puntos suspensivos. Quise presentar una muestra de mi trabajo sobre el fin de la modernidad y el paisaje yucateco como espacio de contemplación y de acción. El dinero que se recaude con la venta de mi obra estará enfocado a cubrir dos necesidades. La primera es terminar de pagar mis gastos de traslado y, la segunda, donar algunas herramientas a la nueva galería de la ESAY. Las herramientas que yo tengo también van a quedarse aquí para uso de los estudiantes”.

[b]¿Cómo te sientes a unos cuantos días de viajar al continente europeo para iniciar tus estudios? [/b]

Te cambia la vida recibir estas becas académicas, que son distintas a las de producción. Sin la beca, para un mexicano resultaría prácticamente imposible estudiar en el extranjero. Fue súper interesante, un proceso dificilísimo y muy burocrático. Solicitar una beca en México es muy complicado, incluso los trámites que debes hacer son más de los requeridos por las propias universidades que te reciben. Para estudios de arte solo existe una beca en todo el país, la del FONCA-CONACYT, y en la disciplina de artes visuales solo otorgaron cinco becas, yo tengo una de ellas. Apliqué a cinco universidades en Reino Unido y fui aceptado en todas. Elegí la Universidad de Kent en función de los maestros y los temas, ya que el plan de estudios está enfocado a la escultura y a la fotografía, que son los temas que yo trabajo, y además ofrece una perspectiva muy política y social. También me decidí por esta universidad porque es la que cuenta con más opciones de becas para un estudiante como yo. Estaré año y medio por allá.

[b]¿Cómo percibes el panorama para el desarrollo de las artes visuales en Mérida?[/b]

Creo que Mérida es un buen lugar para el arte contemporáneo porque está surgiendo todo un movimiento artístico y es muy interesante ser parte de este inicio. Lo que también veo es que falta gente con una buena preparación a nivel académico que pueda compartir sus conocimientos. Ese fue mi propósito al buscar una maestría en un país como Inglaterra, donde el sistema educativo está muy bien establecido en lo que se refiere al arte. Lo que quiero es ir, aprender este sistema y regresar para ver qué se puede hacer aquí.

[b]¿Te gustaría impartir clases a tu regreso, quizás combinar la docencia con la producción?[/b]

Sí, me interesa la educación artística. El pintor alemán Luis Camnitzer dice que el arte es lo que une toda la masa de la educación. Si logramos que el arte se integre a todo el sistema educativo, puede generar nuevos conocimientos y enseñar a las personas una manera distinta de organizar el pensamiento. Creo que el arte puede ser la solución al problema educativo de México.

[b]¿Se puede vivir de las artes visuales en Yucatán?[/b]

Es muy difícil vivir del arte en Yucatán, pero para salir adelante se requiere de trabajo y no de quejas. Necesitamos generar un público y enseñarle que lo que hacemos es digno de coleccionarse. Esta es la primera vez que trabajo en una galería cerrada, anteriormente lo había hecho en espacios alternativos como el Palacio de Justicia o el mar. Por eso para mí fue muy importante presentar un trabajo muy pulido y estético que proyecte lo que he hecho en la calle.

[b]¿A partir de qué elementos desarrollas la conceptualización de tu obra?[/b]

La creación es un impulso, las ideas surgen de cualquier lado. También pienso que el arte es un reflejo de nuestro tiempo. Para mí es importante tratar ciertos temas, por ejemplo en esta exposición se aborda el espacio público, cómo funciona y cómo hacemos uso o no de él. Es el caso de una pieza muy interesante, la fotografía del monumento a la amistad México-Estados Unidos que muy poca gente conoce que este es su nombre, por lo que la interpretación que cada quien hace de la obra es completamente distinta. Algunos lo llaman el monumento a las tijeras, a los dragones o a la paloma y en realidad, como puedes ver, su significado es otro. Tengo otra pieza de una banca, como las que encuentras en un parque, que está flotando en el mar. Esta es una crítica al espacio público como algo a lo que no podemos acceder.

A continuación, José realiza un breve recorrido por el lugar para mostrar las piezas en exhibición. Entre ellas destacan un colorido collage de dibujos e imágenes, capturadas en distintos momentos, unificados en un mismo formato. También presenta 20 fotografías de espacios públicos y privados vinculadas en una composición a través del color. “Se trata de una narrativa, una historia que se va contando en imágenes”, comenta. El color favorito de José es el azul, que en este espacio sobresale de las tonalidades cromáticas que se pueden apreciar. Su proyecto predilecto es, justamente, la fotografía de la banca flotando en el fondo del mar, la cual surgió de una conversación que sostuvo con ciertos arquitectos quienes conciben el espacio público en México, como aquellos lugares donde el gobierno decide colocar bancas.

Ubicadas en otro extremo de la estancia, se encuentran algunas playeras de algodón en las que este artista, a través de la técnica de impresión por sublimación, estampó elementos del paisaje urbano como rótulos comerciales y los escudos de Mérida y Yucatán, un trabajo que realizó de manera conjunta con su amigo, el diseñador gráfico José Antonio Bolio. Casi al centro, está colocada una pequeña instalación que hace alusión a la inevitable convivencia del mundo artificial -el creado por el hombre- con el mundo natural, en la cual queda plasmada la permanente lucha de la naturaleza por apropiarse de un pedazo de tierra revestido de asfalto.

“Cuando me vaya, mi hermano tendrá que cargar los garrafones del agua”, es la frase con la que José, sin disimular su sonrisa, concluye la entrevista. Esta exposición fue inaugurada el pasado miércoles 9 de septiembre y permanecerá abierta hasta el día 15 del mes. Tres días más tarde, el 18 de septiembre, José estará volando sobre un cielo tan azul como sus creaciones, a fin de cruzar de un continente a otro para emprender los estudios que le darán todo el sentido a este, su viaje.

Escuela Superior de Artes de Yucatán
Calle 55 No. 435 entre 48 y 46. Centro Mérida, Yucatán, México
http://www.esay.edu.mx/


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