Paul Antoine Matos
Foto: Rodrigo Díaz Guzmán
La Jornada Maya
Mérida, Yucatán
Lunes 15 de octubre, 2018
El gobierno de Yucatán difundió un boletín en el que asegura que la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (Seduma) ordenó “en el ámbito de sus facultades” la suspensión de la autorización del Manifiesto de Impacto Ambiental (MIA) a la granja de cerdos de la empresa Producción Alimentaria Porcícola (PAPO), en el municipio de Homún.
El miércoles por la tarde de la semana pasada, el Juzgado Cuarto de Distrito estableció la suspensión definitiva del proceso, mientras se realiza el juicio de amparo a mediados de noviembre. En su dictamen, el poder judicial federal estableció que tanto el gobierno de Yucatán y Seduma debían ordenar de manera inmediata la paralización de la granja.
En el comunicado, la titular de Seduma, Sayda Rodríguez Gómez, declaró que “en el ámbito de las competencias de dicha Secretaría, se conminó a la empresa a cumplir con el mandamiento emitido por esta autoridad federal en la audiencia incidental de mérito”.
Señaló que, el gobierno de Yucatán y la Seduma, cumplirán “para que paralice operaciones en la granja porcícola, mientras se encuentre suspendida la autorización en materia de impacto ambiental”.
Con ello, dijo, se reitera el irrestricto apego al Estado de Derecho.
La suspensión definitiva es una medida cautelar que ocurre como parte de un juicio de amparo promovido por seis menores de edad, a través de sus representantes legales, por los riesgos al medio ambiente que puede ocasionar una granja con más de 50 mil cerdos.
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