Yucatecos aportan "ganadería del futuro" para programa nacional

La Jornada Maya
Foto: Produce Yucatán

Mérida, Yucatán
Martes 11 de septiembre, 2018

Ganaderos yucatecos aportaron sus experiencias para el diseño de un sistema de producción que la Coordinadora Nacional de Fundaciones Produce presentará como “Programa Nacional de Restauración de Suelos Agrícolas y Ganaderos”, el próximo 12 de octubre.

Una planta endémica de Yucatán, el huaxim, es la base de un sistema de producción que frena y revierte el problema de deforestación y desertificación que afecta unas 100 millones de hectáreas del territorio nacional, al tiempo que soluciona la alimentación deficiente y la genética inadecuada en la ganadería. Además, es la llave de acceso de los productores a los fondos internacionales del mercado del carbono.

Reunidos en el auditorio del Centro Nacional de Innovación y Transferencia de Tecnología, ubicado en el Parque Científico y Tecnológico de Yucatán, unos 30 ganaderos de Temozón, Sucilá, Dzilam Bravo, Dzilam González y Dzidzantún aportaron sus experiencias con el “Sistema de Producción Silvopastoril” para el diseño del programa nacional, trabajos que coordina Mauricio Mora Pérez, presidente de la Fundación Produce Puebla, A.C.

Llamada ganadería del futuro, aumenta la calidad y producción de forraje y por ende en carne, leche y reproducción animal. Los productores yucatecos reportaron que desde el segundo año de inversión, ya tenían ganancias, pues en una hectárea del sistema de producción silvopastoril es posible tener hasta cinco animales, mientras la unidad tradicional solo permite uno.

En representación de la Fundación Produce Yucatán, la bienvenida estuvo a cargo de su secretario Alberto González Rejón, quien dijo que esas modernas instalaciones del Centro de Innovación y Transferencia Tecnológica son de y para los productores, a quienes instó a utilizarlas en cursos, talleres y foros.

La inauguración del taller estuvo a cargo del Jefe Regional de Desarrollo Rural de la delegación Yucatán de la Sagarpa, Luis Alfaro Rejón, quien estuvo acompañado del jefe del Departamento de Especies Mayores de la Secretaría de Desarrollo Rural del gobierno del Estado, Manuel Garrido Zi.

Enseguida, el Maestro en Ciencias Mauricio Mora dijo que en noviembre del año pasado las Fundaciones Produce acordaron impulsar ese proyecto como uno de los más importantes, para frenar y revertir la degradación de los suelos agrícolas y ganaderos, cuidar el agua y acceder al financiamiento internacional, con el aprovechamiento del mercado de carbono.

Añadió que ese proyecto confirmó la importancia del trabajo coordinado de los productores con la ciencia y la tecnología, porque no se puede depender de los apoyos gubernamentales toda la vida y tampoco hay presupuesto gubernamental alguno que soporte la entrega de toneladas y toneladas de alimentos para el hato.

Ese modelo de producción maneja de forma integral árboles, ganado y pastos, lo que da como resultado una mayor oferta de forraje de mejor calidad nutritiva, la reducción del efecto negativo del calor sobre el consumo y productividad de los animales, la conservación y mejoramiento de suelos y fuentes de agua y el aumento general de índices de producción sostenida.

Busca la reconversión de la ganadería, añadió, con el objetivo de convertirla en una actividad rentable, competitiva y sustentable, ya que la propuesta también tiene un impacto ecológico: por hectárea se sembrarán cuando menos 50 árboles, que capturarán de diez a 12 toneladas de carbono por año y fijarán 300 kilos de nitrógeno en el mismo lapso.

Mora Pérez recalcó que el sistema tiene futuro para la ganadería yucateca, porque incluso es posible comercializar bonos de carbono, o en su defecto, certificar la producción como “carbono cero” en la cual se garantiza que la cantidad de gases de efecto invernadero producidos por la explotación ganadera, sean capturados en la misma proporción por el sistema agroforestal.

Los ganaderos compartieron que incursionaron en ese sistema porque tienen claro la necesidad de mejorar sus condiciones de vida, y dejar a las nuevas generaciones un espacio en buenas condiciones y una actividad que genera mayores ingresos, con animales más productivos en terrenos más pequeños, sin dañar la naturaleza.

En el año 2010, la suma de una planta endémica de Yucatán, el huaxim (Leucaena leucocephala), con la investigación de la Facultad de Medicina Veterinaria generó un modelo sustentable de desarrollo ganadero.

El sistema se basa en el aprovechamiento del huaxim, planta con propiedades que mejoran la producción y calidad de forraje y, por consiguiente, de leche y carne, sin olvidar los efectos positivos en la reproducción bovina y ovina.