Músicos, funcionarios y empresarios debaten tema de ruido

Juan Manuel Contreras
Foto: Captura de pantalla Programa Rockultura
La Jornada Maya

Mérida, Yucatán
Miércoles 21 de marzo, 2018

Un músico, un funcionario municipal, una empresaria y un experto en sonido, integraron la mesa panel “Problemas sonoros en el centro de Mérida”, espacio organizado por Rockultura, en donde los involucrados compartieron sus ideas relativas a la problemática que los altos índices de decibeles han generado a los vecinos del centro histórico emeritense.

Aref Karam, director de Desarrollo Urbano del Ayuntamiento de Mérida, Emiliano Buenfil, frontman de Emiliano Buenfil y su Chancil Tropical, Berenice Vargas, Propietaria de Mayan Pub y Víctor López, experto en sonorización; integraron el encuentro moderado por Alejandro Escalante “Paxux”.

Al hacer uso de la palabra, el funcionario panista destacó la importancia del tema del centro histórico, ya que considera, éste se debe al dinamismo que conlleva el crecimiento de una urbe que ya rebasa el millón de habitantes.

“Es una ciudad atractiva en materia de seguridad, lo que ha permitido que se posicione en un lugar preferente a nivel nacional e internacional. El centro histórico no es ajeno a esta migración, por lo que proliferan los usos mixtos que generan este tipo de problemas”, explicó.

Por su parte, el ingeniero de sonido Víctor López, señaló que la parte complicada del asunto radica en el tiempo al que los escuchas -involuntarios en muchas ocasiones-, se exponen al exceso de decibeles.

“La gente cuando está expuesta durante un tiempo prolongado; y en un lugar cerrado, no se da cuenta, sin embargo, la gente de afuera si lo nota en mayor grado”, advirtió. En ese sentido, resaltó la importancia de tomar en cuenta la diferenciación de sonidos graves y agudos, ya que “si estás en la fiesta, no lo notas”.

El experto precisó que el desarrollo tecnológico en la actualidad sí permite controlar la cantidad de decibeles que emite un aparato.

“No nos cerraron por ruido, sino por Protección Civil”, aclaró Berenice Vargas, propietaria del foro cultural Mayan Pub, ya que en el loca, la dependencia encontró fallas; sin embargo, expresó su voluntad por subsanar los señalamientos, al igual que la de sus colegas, quienes están dispuestos a invertir para mitigar el ruido y conservar la armonía que caracteriza al centro histórico.

El compositor y arreglista Emiliano Buenfil, habló en representación de los músicos, y argumentó que la postura de los artistas que trabajan en la zona es meramente laboral.

“Los cierres que ha habido en los lugares han generado incertidumbre; por lo que en muchos casos se ha decidido parar la música en vivo, lo que afecta directamente a nuestros bolsillos”, presentó.

“También si seguimos tocando y hay cierres, quedan olvidados los otros compañeros, -aunque los demás van a la fiesta-, los compañeros meseros, como los de la barra, de seguridad y de limpieza; todos vamos a la oficina, a chambear, otra cosa es que nos guste nuestro trabajo, y otra es que no sea un trabajo para nosotros.

La falta de capacidad que ambas partes han tenido para llegar a un consenso, en los músicos, se traduce en la falta de empleo, lo cual es preocupante. “Tenemos propuestas, porque finalmente quedamos en medio de la discusión y queremos ser escuchados”, demandó el músico.

Para Karam Espósitos, el cabildo se tomó el problema muy en serio desde el principio, ya que señaló que han sostenido reuniones con las cámaras empresariales, con el patronato del centro histórico, con asociaciones de hoteleros y con los mismos vecinos.

“Hemos avanzado mucho desde el Programa de Desarrollo Urbano que entró en vigor el 18 de octubre, y que ya contempla estos giros, que pudieran no se compatibles con zonas habitacionales”, abundó, ya que consideran a dichos establecimientos como “de alto impacto”. “Es evidente que si lo tienes alado de tu casa, en un área abierta, la concentración misma de la gente genera grandes afectaciones”.

“No es lo mismo estar en la fiesta, que estar durmiendo”, aclaró.

Asimismo, señaló que uno de los grandes actores que hace falta en la mesa es la Secretaría de Salud, pues considera que la dependencia ha evadido su responsabilidad.

“Es su competencia específicamente, el tema del ruido”, aseveró, “Creo que entre todos tenemos que construir una solución entre gestión diálogo, conocimiento de problemas y modificación de las normativas”, agregó.

Relativo a las soluciones, la propietaria del Mayan Pub explicó que “es complicado, pero sí se puede”.

“Al tratarse del centro histórico, es un poco complejo modificar la estructura, porque están protegidas por el INAH, pero si se puede mitigar el ruido. Ya empezamos a comprar bocinas con alta tecnología para dirigir el sonido, al igual que telas que absorben el ruido para la sana convivencia con los vecinos, mas no ha sido suficiente, pero estamos en la disposición de trabajar con ellos”.