La Jornada Maya

Tulum, Quintana Roo
Viernes 6 de diciembre, 2019

Con la convicción de hacer del Festival Internacional de Cine de Tulum un espacio ecológico, formativo y de inclusión, iniciaron las funciones de la sede itinerante en Hondzonot, un pueblo 100 por ciento indígena, conformado por alrededor de 368 habitantes, la mayoría de los cuales no tiene La oportunidad de ver la proyección de una película.

La pantalla de la sede itinerante funciona con una pila solar. Cuando se presentó Fictu Niños, seis cortometrajes polacos de animación, totalmente digitalizados
y restaurados, en colaboración con el FINA de Polonia, cuatro niños pedalearon bicicletas fijas conectadas a un capacitor para alimentar las bocinas y hacer posible el sonido.

Este proyecto, que fue posible gracias al apoyo de Cinema Movil Toto, logra que una proyección se convierta en un acto colaborativo y ecológico. Al finalizar Fictu Niños los adultos pedalearon las bicicletas para dar vida "Tío Yim", de la directora Luna Marán. La película fue doblada al maya, la lengua que habla el 90 por ciento de los integrantes de Hondzonot.

La traducción fue realizada por Cessia Chuc Uc y Gonzalo Maas Pacheco, ambos de la Universidad de Campeche.

También dio inicio a la Carpa Fictu, situada en la zona comercial de Aldea Zamá. A las 18:15 Marcela Arteaga presentó su documental "El guardián de la memoria". Al terminar se presentó "Ya no estoy aquí", de Fernando Frías.


Lo más reciente

Delincuencia organizada: más que un desafío

Editorial

La Jornada Maya

Delincuencia organizada: más que un desafío

El periodismo, la ignominia y el 70 por ciento

Kilómetro 0

Edgar Fernando Cruz

El periodismo, la ignominia y el 70 por ciento

Tiroteo en Universidad Estatal de Kentucky deja varios heridos; hay un detenido

Los hechos tuvieron lugar en el campus universitario de Fráncfort

La Jornada

Tiroteo en Universidad Estatal de Kentucky deja varios heridos; hay un detenido

Tras un cuarto de siglo

La CONANP sigue enfrentando retos en la conservación de área naturales protegidas

Rafael Robles de Benito

Tras un cuarto de siglo