Aunque se trata de una enfermedad que puede afectar a toda la población, la osteoporosis tiene mayor presencia en las mujeres, sobre todo en aquellas que atraviesan por la menopausia, quienes están más propensas a perder masa y fuerza óseas.
La osteoporosis significa hueso poroso, que es consecuencia de la falta de calcio y de la pérdida de masa ósea. Los pacientes suelen sufrir fracturas dolorosas.
El 20 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Osteoporosis para crear conciencia sobre la prevención de esta enfermedad que afecta más a las mujeres que a los hombres.
De acuerdo con la revista científica estadunidense WebMD, la falta de estrógenos es una de las causas identificadas de este padecimiento, por lo que mujeres que se encuentran en la menopausia suelen tener mayor riesgo de presentarla.
“Cualquier período prolongado en el que los niveles hormonales son bajos y los períodos menstruales están ausentes o son infrecuentes pueden causar pérdida de masa ósea”, señala WebMD.
Investigadores de todo el mundo continúan la investigación de la causa exacta de la osteoporosis para determinar el origen del debilitamiento en la estructura interna del hueso.
Sin embargo, organismos sanitarios coinciden en que uno de los factores determinantes es la edad: las mujeres mayores de 50 años tienen mayor riesgo de desarrollar el padecimiento y con cuatro veces más posibilidades que los hombres.
Además, las investigaciones han descubierto que las mujeres caucásicas y asiáticas desarrollan en mayor medida la enfermedad en comparación con las mujeres afroamericanas.
De acuerdo con la Fundación Nacional de Osteoporosis de Estados Unidos, 50 por ciento de las mujeres latinas mayores de 50 años tienen baja masa ósea, un factor de riesgo.
“Si tiene una masa ósea máxima baja u otros factores de riesgo que le provocaron la pérdida de hueso, sus probabilidades de desarrollar osteoporosis son mayores”, explica la fundación.
También influye la estructura ósea y peso corporal, ya que se ha demostrado que la enfermedad se presenta con mayor prevalencia en las mujeres pequeñas y delgadas.
La enfermedad se detecta con una prueba de densidad mineral ósea, la cual es indolora y determina la resistencia de los huesos. Esta prueba se recomienda con mayor énfasis en las mujeres que presentan síntomas de menopausia como bochornos o pérdida de la menstruación.
Como medida de prevención se recomienda el consumo de calcio y vitamina D, así como una dieta equilibrada. El consumo de alcohol y tabaco puede afectar seriamente la masa ósea.
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