Detectan pequeño planeta tan denso como el hierro puro

Científicos detectaron uno de los planetas más pequeños jamás descubiertos fuera de nuestro sistema solar, un mundo abrasador un poco más grande que Marte y casi tan denso como el hierro puro girando alrededor de su estrella de origen cada ocho horas.

Los investigadores dijeron el jueves que lograron detectar el planeta, ubicado relativamente cerca de 31 años luz de la Tierra, y discernir algunos de sus rasgos importantes, lo que ilustra las mejoras en los últimos años en la capacidad de caracterizar planetas de menor tamaño más allá de nuestro sistema solar.

Los científicos están ansiosos por encontrar exoplanetas, como se conoce a estos mundos extraterrestres, que puedan albergar vida. El recién descubierto, llamado GJ 367b, ciertamente no podría, ya que posee temperaturas superficiales feroces y quizás una superficie de lava fundida en el lado que mira hacia su estrella, dijeron. Pero otros pequeños exoplanetas encontrados y estudiados utilizando los mismos métodos podrían surgir como buenos candidatos para nutrir la vida extraterrestre.

Lee: ExoMiner, una nueva red neuronal, descubre 301 exoplanetas

Un cuarto de siglo después de los primeros descubrimientos de exoplanetas, los científicos se han orientado a caracterizarlos con mayor precisión para obtener una comprensión más profunda de su variedad, desde grandes gigantes gaseosos similares a Júpiter hasta planetas rocosos más pequeños similares a la Tierra donde la vida podría prosperar.

"Los gigantes gaseosos como Júpiter, tal como lo conocemos, no son habitables porque tienen temperaturas, condiciones meteorológicas, presiones más extremas y una falta de componentes esenciales para sustentar la vida", dijo la astrónoma Kristine Lam, del Instituto de Investigación Planetaria de la Universidad de Alemania. Aerospace Center (DLR), autor principal del estudio publicado en la revista Science.

"A diferencia de los gigantes gaseosos, los pequeños mundos terrestres como la Tierra son más templados y constan de ingredientes importantes, como agua líquida y oxígeno, para albergar formas de vida. Aunque no todos los exoplanetas terrestres son habitables, buscan mundos más pequeños e identifican el tipo de planetas, esto puede ayudarnos a comprender cómo se formaron los planetas, qué hace que un planeta sea habitable y si nuestro sistema solar es único", agregó Lam.

GJ 367b es el exoplaneta más pequeño que se ha caracterizado con tanta precisión. Tiene un diámetro de aproximadamente 5 mil 600 millas (9 mil km), en comparación con las 7 mil 900 millas (12 mil 700 km) de la Tierra y las 4 mil 200 millas (6 mil 800 km) de Marte. Su masa es el 55 por ciento de la de la Tierra y es más densa, cercana a la del hierro puro, revela el estudio. 

Los investigadores calcularon que el 86 por ciento de GJ 367b está compuesto de hierro, con una estructura interior que se asemeja a Mercurio, el planeta más cercano a nuestro sol. Se preguntan si el planeta perdió un manto exterior que alguna vez encerró su núcleo.

“Tal vez como Mercurio, GJ 367b podría haber experimentado un episodio de impacto gigante que arrancó el manto, dejando un gran núcleo de hierro. O tal vez el exoplaneta es un remanente de un planeta gaseoso del tamaño de Neptuno o una súper Tierra, donde la atmósfera del planeta se ha disparado por completo debido a que el planeta es destruido por una gran cantidad de radiación de la estrella”, dijo Lam.

Orbita muy cerca de una estrella enana roja que es más pequeña, más fría y menos luminosa que nuestro sol, más del 99 por ciento más cerca que la distancia de la Tierra al sol, según el astrónomo y coautor del estudio Szilard Csizmadia, también del Instituto de DLR de Investigación planetaria.

GJ 367b orbita su estrella una vez cada 7.7 horas, colocándola en una categoría de exoplanetas de "período ultracorto" que viajan alrededor de sus estrellas de origen en menos de 24 horas. Un lado de GJ 367b probablemente se enfrenta a su estrella en todo momento, con temperaturas superficiales de hasta aproximadamente 2 mil 700 grados Fahrenheit (mil 500 grados Celsius).

"Esta temperatura es lo suficientemente alta como para evaporar cualquier atmósfera que GJ 367b pudiera haber tenido en el pasado, así como para derretir rocas de silicato y hierro metálico en el planeta", dijo Lam.

Lee también: Descubren la pareja de agujeros negros más cercana a la Tierra

Edición: Estefanía Cardeña