La guerra entre Israel y Hamas ha cobrado la vida de más de 20 mil palestinos, señalaron el viernes funcionarios de salud en Gaza, mientras Israel ampliaba su ofensiva y ordenaba a decenas de miles de personas más que abandonaran sus hogares.
Las muertes en Gaza representan casi el uno por ciento de la población del territorio antes de la guerra, el último indicio del asombroso costo humano del conflicto, que dura ya 11 semanas.
La ofensiva aérea y terrestre de Israel ha sido una de las campañas militares más devastadoras de la historia reciente, desplazando a casi el 85 por ciento de los 2.3 millones de habitantes de Gaza y arrasando amplias franjas del pequeño enclave costero.
Más de medio millón de personas en Gaza (una cuarta parte de la población) están muriendo de hambre, según un informe del jueves de las Naciones Unidas y otras agencias.
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Israel declaró la guerra después de que militantes de Hamas irrumpieran en la frontera el 7 de octubre, matando a unas mil 200 personas y tomando unos 240 rehenes. Israel ha prometido continuar la lucha hasta que Hamás sea destruido y derrocado del poder en Gaza y todos los rehenes sean liberados.
Después de muchas demoras, el Consejo de Seguridad de la ONU adoptó el viernes una resolución suavizada en la que pedía acelerar de inmediato las entregas de ayuda a los civiles desesperados en Gaza.
Estados Unidos logró que se retirara un llamamiento más duro para una “suspensión urgente de las hostilidades” entre Israel y Hamas. Se abstuvo en la votación, al igual que Rusia, que quería un lenguaje más fuerte. La resolución fue la primera sobre la guerra que fue aprobada por el consejo después de que Estados Unidos vetó dos resoluciones anteriores que pedían pausas humanitarias y un alto el fuego total.
Israel promete mantener la presión sobre Hamas
Estados Unidos también negoció la eliminación del texto que habría dado a la ONU autoridad para inspeccionar la ayuda que llega a Gaza, algo que Israel dice que debe hacer para garantizar que el material no llegue a Hamás.
El embajador de Israel ante la ONU, Gilad Erdan, agradeció a Estados Unidos por su apoyo y criticó duramente a la ONU por no condenar los ataques de Hamás del 7 de octubre. Estados Unidos vetó en octubre una resolución que habría incluido una condena porque no subrayaba también el derecho de Israel a la autodefensa.
Hamas dijo en una declaración que la resolución de la ONU debería haber exigido un alto inmediato a la ofensiva de Israel, y culpó a Estados Unidos por presionar para “vaciar la resolución de su esencia” antes de la votación del Consejo de Seguridad del viernes.
Mientras tanto, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, reiteró su llamado de larga data a un alto el fuego humanitario.
Guterres dijo que nada puede justificar los ataques del 7 de octubre de Hamas, su toma de rehenes, sus lanzamientos de cohetes contra Israel y lo que llamó su uso de civiles como escudos humanos.
Israel, protegido por Estados Unidos, ha resistido la presión internacional para reducir su ofensiva. El ejército ha dicho que se avecinan meses de combates en el sur de Gaza, un área repleta de la gran mayoría de los 2.3 millones de habitantes del enclave, a muchos de los cuales se les ordenó huir de los combates en el norte anteriormente en la guerra.
Las órdenes de evacuación han empujado a los civiles desplazados a zonas cada vez más pequeñas del sur mientras las tropas se concentran en Khan Younis, la segunda ciudad más grande de Gaza.
El ejército dijo el jueves por la noche que enviará más fuerzas terrestres, incluidos ingenieros de combate, a Khan Younis para atacar a los militantes de Hamas en la superficie y en los túneles.
El viernes, ordenó a decenas de miles de residentes que abandonaran sus hogares en Burej, un campo de refugiados urbano, y las comunidades circundantes en el centro de Gaza, sugiriendo que lo siguiente podría ser un ataque terrestre.
Creciente cifra de muertes y hambre
El Ministerio de Salud de Gaza dijo el viernes que ha documentado 20 mil 57 muertes en los combates y más de 50 mil heridos. No diferencia entre muertes de combatientes y civiles. Anteriormente, se había dicho que aproximadamente dos tercios de los muertos eran mujeres o menores.
Israel culpa a Hamas por el alto número de muertes civiles, citando el uso por parte del grupo de áreas residenciales abarrotadas con fines militares y sus túneles bajo áreas urbanas.
El ejército de Israel dice que 139 de sus soldados han muerto en la ofensiva terrestre. Dice que ha matado a miles de militantes de Hamas, incluidos unos 2 mil en las últimas tres semanas, pero no ha presentado ninguna prueba que respalde la afirmación.
Durante la mayor parte de la guerra, Israel también detuvo la entrada de alimentos, agua, combustible y otros suministros, excepto los convoyes de camiones con ayuda desde Egipto, que cubren sólo una fracción de las necesidades en Gaza.
Debido a la insuficiente ayuda que ingresa a Gaza, el alcance de la hambruna ha eclipsado las casi hambrunas de los últimos años en Afganistán y Yemen, y el riesgo de hambruna aumenta cada día, según el informe de la ONU del jueves.
Según la Organización Mundial de la Salud, sólo nueve de sus 36 centros de salud siguen funcionando parcialmente, todos ellos situados en el sur.
La agencia informó sobre tasas vertiginosas de enfermedades en Gaza, incluido un aumento de cinco veces en la diarrea y aumentos en los casos de meningitis, erupciones cutáneas y sarna.
Edición: Estefanía Cardeña
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