Afp y Ap
Foto: Reuters
La Jornada

Washington.
18 de noviembre, 2015.

El actor estadunidense Charlie Sheen, tan conocido por su trabajo en cine y televisión como por su adicción a las drogas, alcohol y prostitutas, reveló este martes que es portador del virus del sida.

Estoy aquí para admitir que soy VIH positivo, afirmó Sheen, de 50 años, en una entrevista ofrecida al programa Today en la cadena de televisión NBC.

Sheen, que en su momento fue el actor de televisión mejor pagado de Estados Unidos, reveló que desde hace más o menos cuatro años está al tanto de su enfermedad, que no sabe cómo se contagió del virus. Relató que pagó más de 10 millones de dólares a personas que estaban al tanto de su condición para que no hablaran, pero ahora decidió hacer estas revelaciones para poner fin a los chantajes.

Lo que la gente olvida es que se trata de dinero que le quitan a mis hijos, comentó sobre las extorsiones. Sheen estuvo casado tres veces y tiene cinco hijos. Cuando le preguntaron si sigue pagando dinero por esta razón, el actor respondió: A partir de hoy, ya no. Creo que hoy me he liberado de esta prisión.

Sigue una ola de demandas

El presentador Matt Lauer le preguntó si esperaba una ola de demandas de parejas sexuales anteriores que podrían alegar que las contagió. Sheen respondió lánguidamente: Estoy seguro de que eso es lo que sigue.

Cuando empezó a sentirse enfermo, relató Sheen, tuvo migrañas tan terribles y transpiraba tanto por las noches que pensaba que tenía un tumor en el cerebro y que estaba por morirse. Luego de hacerse varios exámenes –punciones lumbares y todo ese tipo de porquerías, señaló– los médicos le diagnosticaron que era portador del virus que causa el sida.

Son tres letras difíciles de asumir, ¿sabes?, afirmó Sheen acerca del VIH. Es un momento decisivo en la vida de uno.

Charlie Sheen, hijo del actor Martin Sheen, relató que desde el momento en que supo el diagnóstico se lo informó a todas sus parejas sexuales antes de tener relaciones. También dijo que estaba seguro de no haberle transmitido el virus a ninguna.

Cuando Lauer le preguntó si había contagiado a otras personas, respondió: Imposible, imposible. Insistió en que le había informado a cada pareja sexual sobre su estado de salud.

Precisó que desde que fue diagnosticado sólo ha tenido sexo sin protección con dos parejas, a las que no identificó. Agregó que éstas estuvieron bajo el cuidado de mi médico y fueron completamente advertidas anteriormente.

En una carta pública divulgada luego de la entrevista, Sheen dijo: “La noticia fue una ‘patada de mula’ a mi alma. Esas palabras imposibles las absorbí y después traté de convencerme de que había quedado atrapado, suspendido o incluso colgado en una especie de realidad alternativa o pesadilla, pero fue absolutamente lo contrario. Estaba despierto. Era verdad. Fue una carrera suicida. El problema era que me había olvidado de que soy demasiado duro para una salida tan cobarde.

Por no haber perdido el ritmo, una dosis de medicina o una pizca de orientación, rápidamente mis cargas virales se hicieron indetectables. Como ante cualquier otro reto en mi vida, de nuevo había salido victorioso, había pateado el culo a esta enfermedad. Mi equipo médico sólo pudo sacudir la cabeza como todos y cada prueba de sangre regresó a niveles que revelaron un estado de remisión, aseguró el actor.

También comentó que ya no consume drogas recreativas, pero sigue bebiendo un poco.

Mis días de fiesta quedaron atrás, escribió Sheen en una carta abierta difundida por correo electrónico. Mis días filantrópicos están por delante.

Ahora, precisó el actor, acepto esta condición no como una maldición o un flagelo, sino como una oportunidad y un desafío. Una oportunidad para ayudar a otros. Un desafío para ser mejor.

En 2011, Sheen fue despedido de la exitosa serie Two and a Half Men, en medio de una sonada controversia con su productor, Chuck Lorre.

Volvió a la televisión en 2012 con Anger Management, pero la serie dejó de producirse el año pasado.

Saltó a la fama en 1986 gracias a su papel protagónico en el éxito de crítica y de taquilla Pelotón, de Oliver Stone. Luego actuó junto a su padre en la aclamada Wall Street (1987), del mismo director.

Su carrera se catapultó con papeles de televisión en series como Spin City, Two and a Half Men y, más recientemente, Anger Management.

Entre mayo de 2010 y 2011 fue el actor mejor pagado de la televisión, según la revista Forbes.

A lo largo de los años, Sheen ha hablado públicamente de su abuso de las drogas y el alcohol, así como de su afición a contratar prostitutas.

El médico de Sheen, Robert Huizenga –quien apareció en el mismo programa de televisión–, informó que el actor está tomando antivirales, a los que está respondiendo bien, y que ahora tiene un nivel indetectable del virus en su cuerpo.

Está absolutamente saludable desde este punto de vista, puntualizó el doctor. Mi mayor preocupación con Charlie como paciente es el abuso de sustancias y la depresión que viene con la enfermedad, más de lo que el VIH puede hacer en términos de acortar su vida, porque no va a hacerlo.

Robert Huizenga insitió en que Sheen no tiene sida en estado avanzado.


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