Gustavo Castillo
Foto: La Jornada
La Jornada Maya

Ciudad de México
Domingo 26 de noviembre, 2017

Como Máximo Tribunal Constitucional de México y garante supremo de los derechos humanos, así como nos congratulamos de que un juez mexicano, don Eduardo Ferrer MacGregor Poisot haya sido designado presidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), hoy lamentamos y condenamos las últimas agresiones de que han sido objeto algunos integrantes de las comisiones estatales de derechos humanos, afirmó el presidente de la Suprema Corte de la Nación (SCJN), Luis María Aguilar.

Lo anterior durante la ceremonia inaugural del homenaje a Mariano Otero Mestas por el bicentenario de su natalicio, en la Feria Internacional del Libro (FIL) en Guadalajara, Jalisco.

El ministro dijo que como Estado no podemos permitir que se violente la integridad de quienes tienen la encomienda de velar por la protección de los derechos fundamentales de todos, al contrario debemos reforzar estas funciones para garantizar que puedan ejercer con total plenitud e independencia sus atribuciones.

A Mariano Otero literalmente no le alcanzó la vida para haber visto consumados sus ideales y consolidado el México que imaginaba y deseaba. Sin embargo, dejó un legado fundamental y muy importante que retomamos hoy con gusto y con el compromiso de mantener vigente su memoria y honrar su pensamiento.

Deseo que la conmemoración del bicentenario de su natalicio sea una invitación a seguir redescubriendo su obra y en ella sus propuestas y reflexiones. Ahí podemos encontrar algunas de las respuestas que necesitamos para continuar, aún hoy, la construcción del México que queremos y deseamos ser. Un México próspero donde quepamos todos, sin exclusión, sin discriminación, que logre cerrar las brechas de la desigualdad y consolide sus instituciones.

No todos los días nacen personajes de la talla de Otero, pero sí todos los días podemos emprender acciones colectivas que nos permitan avanzar en el tramo que corresponde a cada generación.


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