Ana Mónica Rodríguez
La Jornada Maya
Ciudad de México
Sábado 7 de marzo, 2020
Con 35 años de trayectoria, la banda española Hombres G “conserva la ilusión” de permanecer en la escena musical y su “Resurrección” -aseguraron- se vislumbra a largo plazo.
Reconocidos por temas como [i]Devuélveme a mi chica, Sufre mamón[/i] o [i]Si yo no te tengo a ti[/i], el cuarteto develó, la tarde de este sábado, una placa conmemorativa, previo al concierto que ofrecerá esta noche en la Arena Ciudad de México.
El vocalista David Summers expresó : “sentimos un cariño enorme del público de la Ciudad de México; ya son 30 años viniendo aquí y sintiéndonos como en casa. Siempre que estamos aquí, somos felices”.
Este tiempo, agregó, “ha sido un día y luego otro, hasta llegar a 35 años; mantenemos la ilusión y seguimos en lo que más nos gusta del mundo que es la música”.
Además, el intérprete comentó que los cuatro están felices “trabajando juntos y, mientras esto continúe, seguramente habrá más días como éste y más sold out en la Arena”.
En realidad, “mientras nos aguante la salud, que es lo más importante, lo haremos”.
Sobre cuál es la fórmula de permanecer en el gusto del público, Summers dijo: “quiero pensar que es nuestra música, las canciones y un trabajo intenso permanente, porque nosotros no descansamos nunca”.
Agregó: “siempre intentamos un proyecto nuevo, disco, tenemos una colección de clásicos impresionante y un patrimonio musical, el cual nos permite tener a este público siempre delante del escenario”.
Summers, Daniel Mezquita, Rafael Gutiérrez y Javier Molina, luego de su presentación en el recinto de Azcapotzalco, ante 20 mil personas, continuarán su gira “Resurrección” -la cual es de título homónimo a su más reciente álbum- por varios estados del país y después llegarán a Estados Unidos.
Dependemos en demasía de la electricidad; ¿qué pasa con esos rincones del mundo que viven en penumbra?
Rafael Robles de Benito
El instituto electoral deberá emitir una resolución al respecto
La Jornada
La censura intenta destruir la curiosidad humana, pero en los rebeldes, la alimenta
Margarita Robleda Moguel