Durante la firma de los acuerdos del plan de Justicia al pueblo Yaqui y la petición de perdón por agravios a los pueblos originarios, realizados este martes en Vícam Pueblo, Sonora, el titular del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), Adelfo Regino Montes, expuso que este acuerdo constituye un hito en la historia del pueblo porque “por primera vez se planteó alcanzar una solución de fondo”. Mientras que el gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, recalcó que era un imperativo ético reparar los agravios para el pueblo Yaqui.
Durante el acto en esta región sonorense, el secretario del pueblo yaqui de Tórim, acompañado de Crisóforo Valenzuela, quien hizo la traducción en Yaqui, hicieron una pausa para orar el ave maría, ante lo cual todos los presentes se levantaron en respeto a la ceremonia tradicional.
Tras recordar que en la defensa de las tierras y recursos se han perdido miles de vidas, mientras otros fueron deportados, detalló que se han firmados varios acuerdos de paz, del cual el primero data de 1533, pero fue hasta el acuerdo firmado por el presidente Lázaro Cárdenas cuando se avanzó en el reconocimiento de sus derechos. No obstante, aclaró que dicho convenio “quedó a medias”.
Con la firma de este martes, signada por los ocho gobernadores tradicionales yaquis, se aumentará la producción agrícola y pecuaria y mejorará el nivel de vida, agregó.
A la vez, indicó que el plan de justicia debe plasmarse en un nuevo acuerdo nacional. La propuesta de iniciativa de reforma constitucional sobre derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos está respaldada por 650 mil firmas.
Por su parte, el titular del INPI sostuvo que el acuerdo establece resarcir más de 20 mil hectáreas de tierras para cumplir los acuerdos firmados por Lázaro Cárdenas.
Como primer paso, se firmó la devolución de 2 mil 943 hectáreas para que sean parte de su patrimonio a título comunal.
Mediante la coordinación de la Sedatu se han iniciado los procedimientos de declaratoria y asignación de tierras nacionales, paso que se hará a través del diálogo con los pequeños propietarios y concesionarios.
De manera paralela, se construirá el acueducto Yaqui que tendrá una longitud de 158 kilómetros. Con ello se resolverá el problema de la falta de agua potable para esta región. También se firma el decreto de creación del distrito de riego N° 18, con una superficie de 126 mil 259 hectáreas, y su inmediata transferencia al pueblo yaqui, el cual lo administrará.
“Se analiza las acciones para devolver el agua al sagrado río Yaqui y recuperar el ecosistema”. Con esto, dijo, “estaremos honrando lo que estableció Lázaro Cárdenas al reconocer el 50 por ciento de las aguas de la cuenca del río para este pueblo”.
Salomón Nahmad Sittón, ex director del Instituto Nacional Indigenista, insistió que el Estado tiene una deuda impagable con los pueblos. Apuntó que debe ser el inicio de un nuevo trato hacia los pueblos, porque es la única forma de que México renazca desde sus raíces profundas.
Los oradores en el acto lamentaron el fallecimiento de Agustín González Estrella, gobernador de Vícam Pueblo, primera cabecera del pueblo yaqui en Sonora.
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Edición: Laura Espejo
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