Pese a su mejor versión en mucho tiempo, México ha quedado al borde del precipicio en la Copa América.
Salomón Rondón concretó un penal que le dio a Venezuela la primera victoria de su historia ante el Tricolor, un 1-0 labrado con una admirable dosis de personalidad.
La Vinotinto se instaló en los cuartos de final y quiere quedarse con el primer lugar del Grupo B. México, en cambio, afronta una prematura despedida.
El equipo dirigido por Jaime Lozano ahora está obligado a derrotar a Ecuador, un conjunto fuerte con jugadores que destacan en Europa, el próximo domingo en Glendale, Arizona, o de lo contrario tendrá que arreglar su equipaje para volver a casa eliminado por segunda vez seguida en la primera ronda de un torneo importante. Dicho encuentro comenzará a las 18 horas (T.V.: canales 5 y 7 locales y Tudn).
Contra Venezuela el gran problema fue la falta de pegada. A diferencia de duelos pasados, los tricolores tuvieron posesión y generaron 18 disparos, cinco a puerta. Pero no pudieron marcar un solo gol. Tuvieron al alcance salvar el empate con un penal, pero Orbelín Pineda remató con poca convicción y el arquero venezolano Rafael Romo desvió afuera.
“Tuvimos muchas opciones para irnos arriba en el marcador y hay que trabajar en la contundencia y aprovechar los momentos”, dijo Lozano.
Llamado a ser el referente del ataque, Santiago Giménez volvió a quedarse debiendo. Tuvo la más clara en el primer tiempo. Dominó magistralmente con el pecho un pase de 30 metros de Luis Chávez, pero erró en la definición cuando estaba solo frente al portero.
“Santiago no está en su nivel, tuvo una y la tiene que meter”, señaló el ex jugador Christian Giménez, padre de Santiago, a Fox Sports México.
Lozano volvió a probar que todavía le falta experiencia para hacer ajustes sobre la marcha y que en su cuerpo técnico no hay nadie que lo pueda auxiliar.
El planteamiento inicial de la selección fue bueno, el equipo dominó casi todo el primer tiempo y tuvo buena llegada. En la reanudación, el técnico de Venezuela, Fernando Batista, hizo un ajuste, con el ingreso del volante Cristian Cásseres. Los venezolanos no sólo enderezaron el partido, sino que lo pusieron a su favor.
El cambio de momento fue evidente y ni Lozano ni alguno de sus asistentes reaccionaron a tiempo para hacer algo. Fue sólo hasta después del gol de penal de Rondón cuando realizó movimientos, pero lejos de modificar el planteamiento, hizo cambios hombre por hombre.
Con Edson Álvarez descartado, Lozano se decantó por César Montes como capitán frente a Venezuela y el zaguero central salió del choque a los 45 minutos por una lesión.
Por ahora, el puesto de capitán lo tiene Chávez, situación que podría cambiar para el desafío ante Ecuador.