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La Jornada
27/08/2024 | Ciudad de México
Emir Olivares, Jared Laureles y Alonso Urrutia
A un mes que se cumpla una década de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se reúne con los familiares de los jóvenes en lo que podría ser el último encuentro con el mandatario.
Antes de ingresar a Palacio Nacional, el representante legal de las madres y los padres, Vidulfo Rosales, integrante del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, señaló que debido a que la administración por salir ya no ha dado respuesta a las víctimas, “ya mejor esperamos al próximo gobierno. ¿Para qué nos desgastamos?”.
El abogado planteó que tras las últimas reuniones con el mandatario federal no se ha dado respuesta a los temas demandados por los padres y que consideran fundamentales para el avance de las investigaciones y la localización de los jóvenes, por lo que si en el encuentro de esta tarde no hay mayores detalles al respecto, no ven sentido tener un nuevo acercamiento con López Obrador, quien en 34 días termina su gobierno.
“Honestamente, vamos a ver qué es lo que hay. Para nosotros estas reuniones con el presidente están llegando a su término, no hemos visto nosotros que haya algo diferente, siempre es la misma narrativa, siempre es este complot de organizaciones extranjeras y de derechos humanos (en contra del presidente), este golpeteo sin sentido (a las familias y sus representantes). Vamos a ir, y si es más de lo mismo hoy lo que van a dar, pues entonces se estará evaluando con las madres y padres la pertinencia o la necesidad de seguir o no en las reuniones”.
—¿Analizarán ya no acudir a otra reunión? —se le preguntó.
—Ya mejor esperamos al próximo gobierno. ¿Para qué nos desgastamos? —respondió Rosales.
Insistió que están exigiendo que se abunde en las líneas de la extradición de Tomás Zerón de Lucio, ex titular de la Agencia de Investigación Criminal y quien está prófugo de la justicia en Israel, acusado de tortura y otros delitos; y de José Ulises Bernabé, juez de barandilla que está asilado en Estados Unidos por presunta persecución política; el tema de los 17 estudiantes que fueron trasladados ante el juez de barandillas; qué sucedió con los ingresados en el 27 batallón de infantería; y los 800 folios “que el Ejército no ha querido entregar”.
Para el abogado de las familias “son temas que no ha habido oportunidad de colocarlos en la mesa, porque salen a relucir otras cosas, tangenciales que no tienen que ver. Hay muchas posibilidades de que sea la última (reunión con López Obrador), dependerá hoy, si hoy hay datos de líneas de investigación fundaméntalas que hagan necesario continuar dándole seguimiento, vendremos a otra reunión, si no, lo veo difícil”.
Peña, visiones encontradas
Esto luego de la nueva polémica surgida por el hecho de que la versión oficial en el pasado gobierno sobre estos crímenes, conocida como la “verdad histórica” se habría construido en reuniones en Los Pinos, que eran encabezadas por el ex mandatario, como ya lo había revelado quien fuera presidente de la Comisión para la Verdad y el Acceso a la Justicia para este caso, Alejandro Encinas en su segundo informe.
Mientras el fiscal dijo que los señalamientos de Zerón, sobre esas reuniones donde estuvo Peña Nieto, representan “sólo una expresión de una persona que está involucrada en los hechos y que está huyendo”, por lo que no consideró que sea suficiente para citarlo a declarar; el abogado de los familiares dijo que si hay elementos.
“Si Tomás Zerón está diciendo que es un actor clave (Peña Nieto), que fue uno de los artífices de la ‘verdad histórica’, que a él le encargaron edificar esta investigación y si él dice que le dieron órdenes, pues es importante, se debería tomar con suma seriedad esa declaración que hizo. No en vano Encinas en su segundo informe ya lo delineaba, ya lo ponía sobre la mesa.
“Creo que aquí no hay excepciones en la investigación, si hay una línea, si hay datos de prueba que indican en una probable responsabilidad en irregularidades en la investigación, en encubrir, yo creo que deben ser investigados. No porque sea ex presidente de la República no se le va a tocar”.
Edición: Estefanía Cardeña
