Notimex
La Jornada Maya

Ciudad de México
Domingo 23 de septiembre, 2018

Como un recorrido urbano parecido a las diferentes líneas que nos ofrece el Metro, así describió el escritor mexicano Juan Villoro (1956) su libro "El vértigo horizontal. Una ciudad llamada México"’ esta noche en el Colegio Nacional en el Centro Histórico de esta capital.

Acompañado de los escritores Bernardo Esquinca y Mauricio Montiel, así como por el secretario de Cultura capitalino, Eduardo Vázquez Martín, dijo que se trata de una obra reúne más de 40 crónicas sobre la Ciudad de México, escritas durante las últimas dos décadas.

Villoro señaló que el título de la obra proviene del escritor francés Pierre Drieu La Rochelle, que cuando arribó a Buenos Aires, Argentina, le pidieron su opinión sobre la Pampa, respondiendo que se trataba de un vértigo horizontal.

Villoro aclaró que el texto editado por Almadía capta los últimos 50 años de "esta expansión horizontal en un momento en que la ciudad cambia de nomenclatura, pues hace poco fue el Distrito Federal y zona conurbada y hoy es la Ciudad de México".

“De tal manera que este libro es un acto de amor y de irritación hacia la ciudad; cuenta con un epígrafe de Jorge Luis Borges que dice: no nos une el amor, sino el espanto, será por eso que la quiero tanto, refiriéndose a Buenos Aires”, expreso el autor.

El ensayista y miembro de El Colegio Nacional en el área de Literatura desde 2014, habló también sobre el volumen en el que describe una serie de acontecimientos que con el pasar de los años se van presentando en esta gran urbe.

En su oportunidad, Eduardo Vázquez Martín, señaló que el texto de Villoro "es un extraordinario ejemplo de lo que el cuento y la novela tienden a desdibujarse y el cronista se convierta en un escritor de no ficción que recurre a la inexacta herramienta de la memoria".

Indicó que los jóvenes lectores de Villoro leerán este libro como un códice o tepalcate que estudiar, "aunque las líneas y sucesos sean de este 2018".

“Aunque Villoro sitúa su vértigo, no como reacción al vacío que dan las alturas, sino como descripción de la angustia que provoca un territorio urbano en incontenible desbordamiento, casi tan difícil de abarcar por nuestros sentidos, en mi lectura pesa más el vértigo del tiempo que el del espacio”, señaló Vázquez Martín.

Destacó además que el volumen es a la vez un solo texto con una estructura narrativa integra, "un largo relato que puede ser leído de principio a fin, pero también es el continente de 44 crónicas’.

“Como 'Rayuela' de Julio Cortázar, o como la Torre Latinoamericana, el Vértigo de Villoro tiene múltiples puertas y ventanas”, refirió y coincidió que al igual que su autor, el texto es como el Metro, tiene muchas entradas y salidas, a la parte, presenta una señaleta que clasifica cada estación, según se trate de crónicas de vida, retratos de personajes, sobresaltos colectivos, travesías, de lugares específicos, etcétera.

Por su parte, Bernardo Esquinca, autor obsesivo con la Ciudad de México y con la literatura negra, evocó al primer cronista de esta ciudad: Francisco Cervantes de Salazar, de quien dijo que en 1554 realizó la primera crónica de la que existe registro sobre la Ciudad de México.

Esquinca comentó que en esta publicación Villoro emprende una serie de estrategias para ofrecer sus crónicas; asimismo, consideró que el texto "es una crónica intima, porque la Ciudad de México, presenta datos duros como los de la influenza en 2009".

“Sin embargo, estamos viendo una autobiografía de Juan, y para cualquier persona que lo haya leído o no, estos datos tan íntimos de su biografía personal son emotivos y están enlazados de manera inteligente con la ciudad.

“Y esta es la única manera de abarcar esta ciudad, que son muchas las ciudades dentro de una sola; y se hace a través de la memoria y del recuerdo personal”, comentó Esquinca quien destaco la memoria "fotográfica de Villoro" para la realización de este volumen.

De esto modo, la obra de Villoro es el testimonio más íntimo de la capital, es un texto en el que su autor muestra la versatilidad de su pluma y retrata con la palabra situaciones como las fiestas patrias, que puede leerse en la crónica titulada “Vivir en la ciudad: Los Niños Héroes”.

Las crónicas están escritas desde la propia experiencia del autor o través de realidades ajenas y están acompañadas de imágenes de fotógrafos como Yolanda Andrade, Sonia Madrigal, Marco Antonio Cruz, Doctor Alderete, Paolo Gasparini y Pablo López Luz, entre otros, que reflejan momentos como Semana Santa en Iztapalapa o el viacrucis de viajar en el Metro.


Lo más reciente

Mauricio Vila promueve a Yucatán como polo de desarrollo industrial en Alemania

El gobernador se reunió con un representante de LoRa Alliance en el marco de la Feria Hannover Messe

La Jornada Maya

Mauricio Vila promueve a Yucatán como polo de desarrollo industrial en Alemania

Rommel Pacheco se compromete a atender desperfectos en las calles

Reparación de banquetas y un mejor alumbrado público fueron peticiones de los vecinos

Rodrigo Medina

Rommel Pacheco se compromete a atender desperfectos en las calles

Hagamos ruido contra el ruido busca escuchar propuestas de candidatos sobre la problemática en Yucatán

El colectivo denuncia falta de acción de las autoridades para hacer cumplir la ley

La Jornada Maya

Hagamos ruido contra el ruido busca escuchar propuestas de candidatos sobre la problemática en Yucatán

Estefanía Mercado anuncia el programa ''Solidaridad para las Mujeres''

La iniciativa permitirá detener la violencia para proteger los derechos de más de 110 mil madres

La Jornada Maya

Estefanía Mercado anuncia el programa ''Solidaridad para las Mujeres''