de

del

José Luis Domínguez Castro
Foto: Rodrigo Díaz Guzmán
La Jornada Maya

Lunes 7 de agosto, 2017

En la mitología griega, Mnemosina era la hija del cielo y de la tierra; hermana de Cronos/Saturno y de Rea/Cibeles. Su sobrino Júpiter, en la figura de pastor, la hizo madre de las nueve musas. Igualmente, ha trascendido como diosa protectora de la memoria. De ahí que busquemos practicar la [i]mnemotecnia[/i] para recuperar datos del conocimiento y evitar caer en cualquier grado de [i]amnesia[/i]; mal que de diferentes formas deteriora nuestra esencia humana.

En efecto, es la memoria la potencia del alma por medio de la cual se retiene y se recuerda lo pasado. Aún más, en palabras de Bergson se trata de “la conservación y acumulación del pasado en el presente, lo que constituye la esencia misma de la conciencia. Esto es lo que caracteriza al hombre y lo hace diferente a los otros seres, teniendo historia y tradición”.

Guardar la memoria de alguien o de algún suceso es algo muy nuestro. Por el contrario, ¡cómo nos duele constatar que un ser humano va perdiendo progresivamente la memoria! especialmente cuando se trata de un ser querido y cercano a nuestra conciencia y cómo molesta que en nuestra época de noticias rápidas y de tiempo líquido, que se alimenta de post-verdades y sobrevive con alarmas digitales, se vaya perdiendo la memoria de los hechos que nos construyeron como sociedad.

Los actos cívicos que nos recordaban a los próceres, al tiempo que nos enseñaban lecciones socializadoras, han ido perdiendo importancia didáctica y peso político. Asistí al más reciente homenaje luctuoso al Benemérito de las Américas, padre de nuestra República restaurada y me retiré con el espíritu adolorido, al constatar lo efímero de un homenaje que no duró más de media hora, con todo y pieza musical de despedida y en el que no se alcanzaron a llenar las 100 sillas que se habían dispuesto para los asistentes.

Bajo el imponente monumento de bronce, al que quizá ya poca gente voltea a ver a su paso por el parque de San Juan, los responsables del protocolo tuvieron que colocar una diminuta mampara provisional con el rostro de Juárez encerrado en un óvalo, junto con la fecha y el tema del acto cívico, quizá para que los transeúntes se enteraran de qué trataba el evento. Un discurso mediocre y mal leído, seguido de muchas palmadas y abrazos entre guayaberas, tal y como se estila en estos actos, unas cuantas fotos de grupo ante el homenajeado y sanseacabó. Al salir, algunos periodistas se despedían recordando la hora y lugar del siguiente evento por cubrir: la consagración del nuevo obispo auxiliar…

Me vino entonces a la mente la antigua tradición universitaria de conmemorar la muerte de don Benito Juárez, registrada en informes y publicaciones y que, como parte de la enseñanza de la historia, se mantuvo por muchos años, haciendo acto de presencia en estos homenajes cívicos del 18 de julio, ya que nuestra Alma Máter es heredera del Instituto Literario, fundación que sucedió justamente como parte de este ciclo de restauración republicana. Casualmente, el mismo día del mencionado homenaje se cumplían 150 años del decreto de fundación emitido por el gobernador Manuel Cepeda Peraza. Y mientras me retiraba de tan desangelado evento, me asaltaba una serie de preguntas sin respuesta: ¿por qué la universidad dejó de asistir a estos actos de profundo sentido educativo y en el aniversario de tan importante efeméride? ¿Dónde estarían los universitarios; al menos sus autoridades, los representantes de las agrupaciones de académicos, sindicatos y asociaciones estudiantiles y dónde los miles de ex universitarios que hemos sido beneficiarios de tales instituciones?

No cabe duda de que la memoria histórica se alimenta de rituales cívicos y que los seres humanos necesitamos de estas liturgias en sus diferentes formatos, para recrear nuestra conciencia identitaria. Siguen siendo importantes las celebraciones de los aniversarios, las visitas a sitios simbólicos y lugares representativos, como importantes son las recordaciones de personajes de los que somos deudores. En este sentido, comparto con los lectores el gusto de haber sido testigo de la visita que un grupo representativo de alumnos, maestros y trabajadores de la Unidad Académica de Bachillerato con Interacción Comunitaria (UABIC) hiciera antes de las vacaciones a las instalaciones del Centro Cultural Universitario y al local que ocupara la vieja Universidad de Mérida de Yucatán, fundada en 1624, otra de las instituciones que nos precedieron y que refuerza nuestro orgullo universitario. Sin duda, esta experiencia inolvidable por el interés que visiblemente despertó entre los estudiantes quedó grabada en la memoria de quienes participamos en el recorrido. Felicito a la coordinación de la Prepa 3 por haber propiciado tal iniciativa.

Recordemos que los aniversarios no son cosa de un solo día. Cuando se nos olvida la fecha exacta de un cumpleaños, procuramos felicitar al homenajeado, aunque sea unos días después. Cabe recordar que todo este año, los universitarios tendremos motivos para celebrar y recordar: durante el mes de agosto, hace 150 años, se sentaron las bases académicas del Instituto Literario con la elaboración de programas y contenidos que tendría la nueva institución; una semana después, en torno al día 15, se inauguraron formalmente las clases en el viejo edificio del Colegio de San Pedro (actual edificio central universitario).

Recordaremos, durante el resto del año, quiénes fueron los actores, cómo se obtuvieron los fondos para financiar tan ejemplar iniciativa y cuáles fueron sus principales efectos en la sociedad yucateca.

Finalmente, celebro que el recuerdo de la fundación del Instituto Literario sea un tema de interés para todos y figure entre los eventos trascendentales que la prensa local registra cada domingo su columna conmemorativa de hechos históricos. Ahí consta que para los 100 años del mencionado Instituto se mandó publicar la edición de un libro conmemorativo, a cargo de Rodolfo Ruz Menéndez. Sería muy oportuno que la Universidad Autónoma de Yucatán facilitara la reproducción masiva de dicha publicación, a fin de favorecer la mnémesis de los hechos aludidos.

[b][email protected][/b]


Lo más reciente

Por primera vez en 27 años, EU modifica clasificaciones de raza y etnia para las personas

Permitirá que residente se identifiquen como hispanos, de Medio Oriente y herencia norteafricana

Ap

Por primera vez en 27 años, EU modifica clasificaciones de raza y etnia para las personas

Ataque israelí mata a 36 soldados sirios cerca de Alepo: ONG

El objetivo eran los depósitos de misiles del movimiento libanés Hezbolá

Afp

Ataque israelí mata a 36 soldados sirios cerca de Alepo: ONG

Así es cómo la inteligencia Artificial predice el sabor y calidad de la cerveza

Los modelos pueden predecir qué compuestos agregarle para mejorarla

Europa Press

Así es cómo la inteligencia Artificial predice el sabor y calidad de la cerveza

Green Day encabezará concierto climático global respaldado por la ONU en San Francisco

La entradas estarán disponibles desde este viernes en Ticketmaster

Ap

Green Day encabezará concierto climático global respaldado por la ONU en San Francisco