Ya merito tengo el mérito

Jorge Buenfil Ávila
Foto: cortesía Jorge Buenfil
La Jornada Maya

Viernes 05 de mayo, 2017


Una vez más, en la Ciudad de México, se celebra la semana de Yucatán; antes solían invitarme; alguna vez canté con mi compadre Pastor Cervera en los años en que lo hacíamos a dueto. Recuerdo que actuamos en un comedor inmenso, en donde todo mundo hablaba y muy pocos tomaron en cuenta nuestro canto, otros comensales ni se enteraron de nuestra actuación; claro, eran pésimas las condiciones de sonido y, sin duda, no era el lugar adecuado para una presentación y menos si uno de los protagonistas era Pastor Cervera.

En un lugar aledaño había un gran escenario, con excelente sonido, luces y todas las condiciones adecuadas para un evento de gran magnitud, ese sitio era para “los famosos”. Al terminar nuestra actuación, una persona se nos acercó y visiblemente molesta le preguntó a mi compadre: “¿Don Pastor, porqué ustedes no estuvieron adentro?” Pastor contestó, con su ironía y gracia maravillosas: “Es que nosotros todavía estamos chicos, tenemos que hacer méritos”. Me tomó del brazo y nos fuimos.

Sin embargo, aunque no nos trataban como “famosos”, al menos nos invitaban. Cabe decir que uno se la pasa trabajando, no para obtener fama sino para regresarle algo a la música popular que tanto nos ha dado, dejar un producto de calidad; tampoco se trata de hacer mérito ante ninguna institución, funcionario o gobierno, sino de respeto al público que nos sigue y al amor que le tenemos a nuestra trova.

Tengo ya 44 años de carrera musical; en ese tránsito he tenido la fortuna de vivir experiencias maravillosas, en mis inicios (los setentas), dirigí a dos de los grupos más importantes de la canción latinoamericana, El Machete y el Tupac Amaru, fui acompañante de tres de los más importantes cantores de la música popular de nuestro país, Tehua, Amparo Ochoa y Óscar Chávez, formé parte del conjunto de guitarras del maestro Alfredo Zitarrosa, voz emblemática y esencial del canto latinoamericano y como compositor he realizado cientos de programas de televisión, tanto en las cadenas comerciales, como en las culturales, he pisado los principales teatros de la República Mexicana, he acudido a infinidad de festivales Internacionales, el Cervantino, el Festival Internacional de Tamaulipas, el Festival Internacional de Zacatecas, el Festival Internacional Ortiz Tirado, en fin…

Me detengo para hacer una aclaración, en varios de esos Festivales el invitado especial era Yucatán; sin embargo, las autoridades culturales de mi estado nunca me tomaron en cuenta; recibí la invitación de los organizadores, directamente. ISSSTE Cultura develó una placa en el teatro Ciudadela por las 200 representaciones en toda la República de mi espectáculo Las canciones de amor ayer y yo; se me otorgó la Medalla al Mérito Artístico, la Pastor Cervera y la Ricardo Palmerín; gané el Festival del Nuevo Bolero Mexicano y el Festival Juan Acereto, en fin…

Con estas líneas no pretendo hacer un autoelogio; también sé que hablar de uno mismo puede resultar horrible; sin embargo es preciso llamar la atención sobre esto, por razones más que individuales.

En el 2015, por iniciativa del grupo Yahal Kab, durante su presentación me invitó a cantar dos canciones, a manera de reclamo, porque se les parecía ofensivo que no estuviera invitado.

En el 2016, tampoco estuve en el elenco. El secretario de Cultura, Roger Metri, argumentó que no tenían presupuesto; después, un empleado de la institución, Jesús Armando, me comunicó que tras un “gran esfuerzo” cantaría dos canciones con la orquesta típica y me reiteró que había muy poco presupuesto.

Las excusas basadas en la falta de recursos levantan sospechas, pues los honorarios de los elencos que contratan resultan muy onerosos; sin embargo accedí, pues quería ver la reacción de un público que sé que me tiene cariño, no sobra decir que la respuesta fue maravillosa; pedían otra, otra, otra, pero no se pudo, me aplicaron la frase “cantas dos y te vas”.

Pregunto a las autoridades: ¿cuál es el criterio para seleccionar a quienes participan en la Semana de Yucatán en México? ¿Existe un comité capacitado que los selecciona? ¿Qué méritos hay que lograr?

Ojalá me pudieran responder, para ver de qué modo me hago merecedor de la invitación. Si mis méritos no son suficientes para los meros meros, pues me quedo en el ya merito tengo el mérito…