Opinión
Normando Medina Castro
07/05/2025 | Chetumal, Quintana Roo
En la misiva leída en la reunión del Consejo Político Nacional de Morena del domingo próximo pasado, no hay una simple lista de buenos deseos, sino parámetros claros desde los cuales, la militancia, el pueblo, pueden juzgar la conducta, los hechos, de mujeres y hombres empoderados por Morena en legislaturas, presidencias municipales municipales, gubernaturas, etcétera.
El énfasis debe estar, no en lo que dicen y publican, ni siquiera en su origen y su calidad de fundadores “puros” o incorporados procedentes de otros partidos políticos, sino en sus hechos, su comportamiento, sus acciones, su conducta. ¿Cómo ejercen el poder que les dio el pueblo por la marca Morena que los cobija?
La presidenta de México Claudia Sheinbaum Pardo apunta en su carta que las y los morenistas empoderados deben conducirse con sobriedad y humildad, respetando los principios básicos de austeridad y humanismo con cero tolerancia a la corrupción.
Las y los simuladores infiltrados en Morena quedan evidenciados cuando son sometidos al tamiz de las expresiones de Sheinbaum en su carta donde condena el nepotismo y subraya que “el recurso público es sagrado” y debe ser ejercido con honradez y responsabilidad.
El gobierno Verde-Morena de Quintana Roo debe ser visto y evaluado por el pueblo desde los principios ético políticos que enumeró la mandataria nacional. Los contratos de obra, la calidad de las obras, las facturaciones, las obras mismas, ¿son realmente para el bienestar de la población? ¿ejercen los recursos públicos con honradez y responsabilidad? Es penoso que la alcaldesa de Othón P. Blanco, Yensunni Martínez, mantiene a la empobrecida Chetumal con calles, avenidas y parques a oscuras, en deplorable estado y con violencia e inseguridad boyantes. Y las tareas de promover el desarrollo? Simplemente cero. Sheinbaum habló de rechazar viajes en aviones privados o helicópteros, evitar la frivolidad, ropas caras, guaruras, séquitos de camionetas, etcétera.
También enfatizó evitar viajes al extranjero y el turismo político. Las delegaciones de Quintana Roo a FITUR en España, numerosas y onerosas. Con funcionarios como el diputado federal Humberto Aldana que presumió en redes sociales sus fotos en el estadio Santiago Bernabeu. Y el aprecio a la historia? Sheinbaum Pardo lo destacó. En Quintana Roo los monumentos a Don Andrés Quintana Roo, retirados, arrumbados sin ningún respeto, como en el Congreso del Estado cuando era presidido por el mismo admirador de los “merengues”, quien tiró un monumento para hacer una cafetería.
Ninguno de las y los once presidentes municipales de Quintana Roo pasa medianamente el tamiz de la guía ético política de Sheinbaum. El futbolista regio, Diego Castañón, alcalde de Tulum, se esfuerza pero termina cayendo en los mismos vicios. Su policía ineficiente para frenar la violencia y la inseguridad, es eficaz para detener con la fuerza a un niño de nueve años por vender pulseras artesanas en la playa, y están listos para retirar con grúa vehículos por cualquier nimiedad y sin consideración ni criterio. En fin, son cosas que pasan en nuestro país y en nuestro caribeño Estado.
¡Hasta la próxima!
Edición: Fernando Sierra