Opinión
Harlen Tzuc Salinas
30/06/2025 | Chetumal, Quintana Roo
-¿De qué forma le gustaría aprender? -pregunta Erick-. ¿Dibujando? ¿Escribiendo?
La maestra Yoli, tras pensarlo un momento, responde:
- Escribiendo… Observando y escribiendo.
Así inicia un ciclo de tutoría bajo el modelo de la relación tutora, en el que Erick, estudiante de sexto grado de primaria comunitaria, funge como tutor de Yolanda, una experimentada profesora de primaria.
Esta significativa interacción se llevó a cabo los días jueves 12 y viernes 13 de junio, durante la etapa final de la Olimpiada del Conocimiento Infantil (OCI) 2025, con la participación de diez estudiantes de sexto grado de primaria de la modalidad de educación comunitaria ofrecida por el Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe). El encuentro tuvo lugar en las instalaciones de la Universidad Autónoma de Quintana Roo, en la ciudad de Felipe Carrillo Puerto, Quintana Roo.
La jornada inició con la oferta de temas por parte del grupo de tutores -niñas y niños- hacia el grupo de aprendices, conformado por docentes, directivos y supervisores de escuelas primarias, convocados para tal fin. Los temas ofertados, elegidos por los estudiantes, son de su propio interés, tales como animales marinos, los hongos, las abejas, las bromelias, el cáncer de mama, las vacunas, los corales, el lenguaje de señas mexicano…
Con llamativos carteles, maquetas y otros materiales, los niños y niñas presentaron sus temas. Despertaron la curiosidad de los aprendices con preguntas provocadoras como: “¿alguien sabe cuál es la importancia de los corales?”, “¿la abeja es la única que poliniza?”, “¿los hongos son animales o son plantas? Al término, las y los profesores eligieron el tema a estudiar con su tutor o tutora.
Erick tutoró el tema del cáncer de mama. Lo preparó de manera autónoma, recurriendo a libros y a fuentes digitales. Sus experiencias previas de tutoría le han motivado a enriquecer su presentación y mejorar su manera de interactuar con los aprendices. En su preparación para la OCI, incluso tutoró a sus educadoras y a una enfermera de una comunidad cercana.
Durante las sesiones, Yolanda fue cautivada por diversas actividades que Erick le proponía, desde memorama, sopa de letras, cuentos, videos, juegos, colorear, entre otras, todas pensadas para facilitar el aprendizaje. Sin embargo, una no tuvo éxito, a Yolanda no le gusta manipular la masa moldeable, Erick no insistió, dialogaron y juntos buscaron una alternativa.
El segundo día del encuentro tuvo un carácter más reflexivo. Las duplas concluyeron sus actividades y prepararon el producto final a presentar en una demostración pública. Voluntariamente, cada aprendiz pasó al frente del círculo en compañía de su tutor o tutora. Algunos profesores, visiblemente animados, se referían a los estudiantes como “mi maestro” o “mi maestra”, con una genuina sonrisa; compartieron experiencias personales relacionadas con los temas y elogiaron la dedicación, creatividad y empatía de sus tutores.
También reflexionaron que no es obligatorio saberlo todo, ni tener todas las respuestas, y que es válido decir “no lo sé, pero lo voy a investigar” como apreciaron de sus tutores. Al finalizar, el equipo de observadores, que siguió de cerca cada relación tutor-aprendiz, compartió con el comité de selección sus valoraciones basadas en los principios pedagógicos de la relación tutora. Además, se tomaron en cuenta los comentarios escritos y orales de los aprendices sobre su experiencia y el desempeño de quienes les tutoraron.
El comité de selección tendrá la difícil tarea de determinar al ganador o ganadora del certamen. Sin embargo, como lo expresó la doctora Nancy Chávez, coordinadora territorial del Conafe en Quintana Roo durante el acto inaugural, todas y todos los finalistas ya son ganadores, porque han vivido una experiencia de aprendizaje que dejará huella en su camino, y lo mismo puede decirse de sus compañeras y compañeros en sus comunidades, son ganadores de la oportunidad de aprender lo que realmente les apasiona, sin juicios, sin límites y sin presiones, donde el aprendizaje nace en el interés auténtico y florece en el diálogo con libertad.
Harlen Tzuc Salinas es investigadora colaboradora del Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe)
Edición: Estefanía Cardeña