Clausuran dos establecimientos en Tulum por no acatar medidas sanitarias

El operativo se realizó en la zona costera y comerciales
Foto: Ayuntamiento de Tulum

El Ayuntamiento de Tulum en coordinación con autoridades de los tres órdenes de gobierno realizó la clausura de dos establecimientos durante un operativo nocturno de inspección la noche del viernes, como parte del reforzamiento de las acciones para verificar la aplicación de las medidas sanitarias para prevenir contagios de COVID-19.

En el operativo realizado en zonas comerciales y la zona costera participaron la Dirección de Salud Municipal, la Coordinación de Protección Civil, la Dirección de Desarrollo Urbano, Seguridad Pública y Tesorería en conjunto con la Fiscalía General de Estado, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios y la Secretaría de Finanzas y Planeación del estado.

Se realizó la clausura de los establecimientos denominados Esencia (Roc) y Gitano Tulum, por superar el aforo de clientes y no respetar las disposiciones sanitarias para prevenir contagios de COVID-19, establecidas por el gobierno del estado durante el semáforo epidemiológico en color naranja.

Estos operativos se realizan de forma periódica en todo la geografía municipal, adicionalmente con el programa de chalecos naranjas se recorren las zonas comerciales y turísticas para regalar cubrebocas y concientizar a los ciudadanos y comerciantes sobre su uso y la sana distancia.

Edición: Elsa Torres


Lo más reciente

99.8 millones de mexicanos tienen derecho a ejercer su voto este 2 de junio: INE

La entidad con la lista nominal más grande es el Estado de México

La Jornada

99.8 millones de mexicanos tienen derecho a ejercer su voto este 2 de junio: INE

Serpiente bejuquilla, una flecha en la selva

Especial: Fauna Nuestra

Ana Ramírez

Serpiente bejuquilla, una flecha en la selva

Cuando a Mérida le cambió el rostro

Noticias de otros tiempos

Felipe Escalante Tió

Cuando a Mérida le cambió el rostro

Es peor que una sentencia de muerte

Las dos caras del diván

Alonso Marín Ramírez

Es peor que una sentencia de muerte