Viuda de 92 años asegura que el amor dura toda la vida

Katia Rejón
La Jornada Maya

Mérida, Yucatán
Jueves 14 de febrero, 2019

Doña Zoila Díaz está por cumplir 93 años, de los que lleva 24 de viuda. Pasa la mayor parte del tiempo en su casa, ubicada en el oriente de la ciudad. Tiene una terraza grande llena de plantas y la sala parece una casa de muñecas por los tonos azules y rosas pálidos de las paredes, llena de fotografías y flores artificiales.

Uno de los retratos más grandes es de su esposo, México Armando Ríos Falcón, en la que aparece con el uniforme de los Scouts. Con ayuda de su bastón, se sienta en uno de los sillones de la sala, forrado con una sábana blanca de flores rosas y dice: “nada más tienes que hablarme más fuerte, porque así no escucho”.

Cuando tenía 20 años nunca salía, sus papás eran muy estrictos. Una vecina, amiga suya, le presentó a México Armando porque él quería conocerla. “Le dijeron que yo no le hacía caso a nadie. Que mi novio tenía que ser como mi papá: de su trabajo a su casa. Mi papá no tomaba, no fumaba, nada de paseos. Él les dijo que esas eran las que le gustaban y que me iba a conquistar”, cuenta.

Para acercarse a ella, la invitó a ser su pareja en un bautizo, pero su papá no la dejó. Así que le pidió que mejor le hiciera el traje, porque siempre ha costurado. “Lo veía siempre parado en la esquina de mi casa como monigote. Así empezamos a platicar y cuando me di cuenta ya éramos novios. Duramos dos años de novios y nos casamos”, agrega.

Su esposo era mecánico electricista y tenía un taller con sus hermanos en la calle 62 del centro. Estuvieron casados 47 años y su esposo siempre le decía que cuando cumplieran 50 años lo iban a festejar en grande, pero un día “como a esta hora hace 24 años, falleció”. México Ríos padecía de la presión, tenía colesterol, angina en el pecho y otros padecimientos que hicieron que muriera del corazón a los 71 años.

[b]La edad promedio de las viudas es de 67.7 años[/b]

En 2015, el Consejo Nacional de Población (Conapo) estimó la esperanza de vida para los hombres en 72.3 años, mientras que para las mujeres en 77.5 años. La edad promedio de las mujeres viudas es de 67.7 años; a la señora Zoila le ocurrió a los 69.

Zoila Díaz cree que el amor dura toda la vida y no se volvió a casar. Cuando se murió su marido, y único novio, comenzó a salir más con sus amigas, trabajaba, tomó clases de teatro e iba a actuar a los pueblos. “Murió el maestro y se desbarató todo. Ahorita ya todas mis compañeras fallecieron. Claro que hubo pretendientes pero yo decía que sólo amigos, que nadie crea que le voy a hacer caso para que se case conmigo”, afirma.

Tiene otras amigas viudas que se volvieron a casar a los tres meses, o tienen novio, pero ella afirma que está bien así. “Hasta mis hijas me decían que buscara un compañero pero no lo necesito. No estoy sola, me acompañan mis hijos, mis nietos. Mi marido fue bueno, y si me busco a otro me puede maltratar. Estoy mejor sola”, agrega.

La mejor parte de su relación y los momentos más bonitos, dice, fue cuando se acababa de casar. “No teníamos pleitos. Discutimos, pero hasta la noche. Nos decíamos lo que no nos gustaba. Él no era de pelear ni gritar”, recuerda.

[b]Etapas del enamoramiento[/b]

La doctora Ligia Vera Gamboa, investigadora del Centro de Investigaciones Hideyo Noguchi, explica que el enamoramiento tiene un periodo limitado que algunos autores establecen dentro de los primeros dos o tres años de la relación. Después de esa etapa hay otra en la que la pareja siente un apego y compromiso mayor que en la primera. “Por eso hay que hacer una diferencia entre el enamoramiento y el amor, cuando logra estabilizarse y más allá de la primera etapa”, comenta.

Al preguntarle a doña Zoila Díaz su opinión sobre los matrimonios actuales que duran menos tiempo que antes, opina que “en eso no hay amor. Tiene que haber amor para conservar el matrimonio. Mi hija tiene 30 años de casada; la otra no pero porque le tocó mala suerte. Su marido tomaba mucho y le pegaba. Se divorció muy joven, de 23 años”.

A diferencia de los matrimonios jóvenes donde uno de los dos queda viudo, en los matrimonios longevos, cuando ambos son adultos mayores, se asimila que es algo que puede suceder. “Conozco viudos jóvenes que llevan tres años desde que falleció su pareja y todavía sienten que es poco tiempo. Es posible que sea más difícil para los jóvenes”, afirma la sexóloga Vera Gamboa.

Zoila Díaz recalca que, cuando quedó viuda, buscó en qué entretenerse: tejía, bordaba, hacía trajes para quinceañeras, aprendió repostería. “El caso es que una no esté ociosa”, apunta.

Está a punto de llover pero no llueve. Como a esta hora hace 24 años falleció su esposo. Ella se queda mirando a la ventana esperando a qué hora va a caer la lluvia y dice: “Es muy bonito cuando uno se quiere, la verdad”.

De acuerdo con el Inegi, en 2016, ocho de cada 10 personas viudas en México eran mujeres. La condición de viudez es mayor en la población de 60 años y más. Hay incluso un Día Internacional de la Viudas que se festeja, desde 2010, el 23 de junio, para exhortar a los estados a prestar atención a la situación de las viudas.