Juan Manuel Contreras
La Jornada Maya
Mérida, Yucatán
Jueves 20 de febrero, 2020
La avenida Jacinto Canek luce más congestionada de lo normal, los conductores “aporrean” su claxon en una sinfonía de chirridos y gente impaciente que solo puede anunciar el inicio de la máxima fiesta emeritense: el Carnaval que dio inicio el día de ayer con la tradicional “quema del mal humor” y la coronación de los reyes, en la Central de Abastos.
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Ajenos a la nostalgia, cientos de adoradores de Momo se dieron cita en la explanada de ese centro de distribución para presenciar la coronación de los monarcas Paola I e Isaac I. El acto inició pasadas las 21:00 horas y estuvo encabezado por el alcalde Renán Barrera y su esposa Diana Castillo, entre otros funcionarios de la comuna.
Policías municipales guiaron el camino de los asistentes hasta el estacionamiento, que según se constató, estuvo bien organizado evitándole dolores de cabeza a la concurrencia. En contraste, algunas caras largas se dibujaron a la entrada tras el cateo, cuyo propósito fue “que nadie pase nada prohibido”, en palabras de un uniformado.
Las joyas de las coronas soberanas deslumbran ante las cámaras de la prensa; y los asistentes únicamente dan la espalda al escenario para sacarse la “selfie” de rigor. Los funcionarios municipales desfilan, los varones portando saco y las féminas ataviadas con elegantes vestidos de noche.
La oferta culinaria se asemeja a la de aquellas fiestas carnestolendas en el Paseo de Montejo. Brochetas, marquesitas y cacahuates pasean sobre los hombros de los oferentes despertando los antojos de los infantes, que insistentes, jalan la mano de sus progenitores para solicitar la golosina del momento. Hay cosas que no cambian.
Betania Abreu y María de Zavala amenizaron los momentos previos a la presentación del show Latino, en el que cerca de 25 bailarines hicieron gala de sus mejores pasos al son de canciones de Diego Torres, Thalía y otros éxitos de la década de los noventas.
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La vigilancia en el recinto se hizo notar con la presencia de sus tres niveles. Torres de las corporaciones municipal y estatal se erigieron sobre el asfalto; y elementos de la Guardia Nacional discutieron sobre dónde renovar su INE, ante la tranquila jornada registrada en la Central de Abastos.
“Solo porque estaba cara la cheve, no fue borrachera”, advirtió un asistente al desembolsar 30 pesos para adquirir una lata de Modelo a medio helar. A su alrededor, más de tres mil personas esperaban ansiosos el concierto de La Trakalosa de Monterrey, el plato fuerte de la noche.
En un escenario contiguo, esa agrupación regiomontana hizo su aparición al filo de las 23:00 horas y deleitó a la concurrencia con sus mejores éxitos. Entre fuegos artificiales, inauguraron la jornada carnestolenda que a partir de hoy se traslada al recinto ferial de Plaza Carnaval, en X’matkuil, con numerosas actividades destinadas al disfrute de las familias meridanas.
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