Contrastes en la educación, pandemia marca vulnerabilidades

Las desigualdades se siguen expresando en las zonas marginales por razones económicas
Foto: Rodrigo Díaz Guzmán

La urbe y el interior del estado de Yucatán son escenarios distintos cuando se habla de educación en tiempos pandémicos, ya que depende de la clase social y el acceso a recursos que tenga la familia para apoyar al alumno. No es un panorama homogéneo el que se dibuja en el horizonte de las y los estudiantes de la entidad. 

La pandemia lo que ha hecho es agudizar las desigualdades que ya existían en la educación. Desigualdades que se siguen expresando en procesos mucho más bajos de aprendizaje en el caso de las poblaciones indígenas y zonas marginales por razones económicas, señaló el doctor en Educación Juan Carlos Mijangos Noh.

“Se agudiza porque si ya era deficitaria la formación escolarizada en términos regulares, la contingencia lo que ha hecho es aumentar este déficit. Estamos hablando de poblaciones que no tienen un acceso a un conjunto de recursos que las clases medias y altas dan por sentados”, detalló.

El Dr. Mijangos vive en Canicab, una comunidad maya en el municipio de Acanceh en donde coordina un centro comunitario, lo que le ha permitido atestiguar de primera mano estas diferencias. En Canicab hay 100 casas, de las cuales 15 o 20 tienen acceso a internet, y de bastante mala calidad.

“Los que pueden reciben la tarea a través del WhatsApp, por ejemplo. El nivel de interacción es sumamente precario; y las transmisiones televisivas tienen la desventaja de la ausencia de la interlocución”, expuso.

El problema está, dijo, en que el capital cultural -concepto que engloba elementos destacados en un programa de estudios- no forma, corresponde a la realidad de sus vidas, y esa es una situación que ya sucedía desde antes de la contingencia sanitaria.

“Antes tenían a un humano enfrente suyo que de alguna manera intentaba ponerlos en el contexto del conocimiento. Ahora uno no le puede preguntar al televisor, sino requiere de una conexión a internet suficiente que permita interactuar con la figura del docente”, criticó.

“Por ejemplo, un niño que va a una escuela privada, que tiene una buena conexión a internet en su casa y cuyos padres son profesionales de cualquier área del mundo escolarizado, tiene un capital cultural que le permite interactuar, aún en estas condiciones, con sus maestros”, sentenció.

 

Recuperación de saberes

En el marco de la actual pandemia, el Dr. Mijangos ha notado un fenómeno interesante que consiste en la recuperación de ciertos saberes. Pala él, pensando en la educación más allá de las aulas, la contingencia ha detonado que jóvenes vuelvan a incorporarse a tareas que ya no formaban parte de su vida cotidiana.

“Como los papás no tienen trabajo y los niños y las niñas no tienen escuela presencial, se los llevaron a los terrenos en el ejido que hacía años que no trabajaban, para sembrar un poco de maíz, calabaza o frijol y poder sobrevivir”, apuntó.

Añadió que de dentro de las políticas relativas a los derechos de las niñas y los niños, hay un conjunto de dificultades, pero el hecho es que están aprendiendo cosas nuevas que la escuela no valora, ni enseña.

En su centro comunitario han aparecido niñas, niños y adolescentes que comienzan a buscar cosas que antes no buscaban, por ejemplo, la agricultura, cría de animales. Conocimientos que incluso la gente mayor dejó de saber cómo hacer.

“En algún punto la escuela ha perdido su monopolio de ser la fuente de conocimiento por excelencia. Incluso el internet, pese a sus carencias ya mencionadas, se convierte en un espacio de aprendizaje en el marco de la pandemia”, acotó.

 

Muchos han abdicado

En Canicab, en donde vive, algunos jóvenes definitivamente dejaron la escuela. Hay jóvenes que estaban listos para ir a la prepa, y al ser el internet la única manera de hacerlo, y no tener para pagarlo, abdicaron ante los precios de las laptops. 

“Si la familia quiere que un muchacho vaya a clases, o trabajan varios dentro de la familia o se endeudan de tal manera que les va a llevar mucho tiempo recuperarse. Ninguno de los docentes es de ahí. Es gente que no estaba capacitada para entrarle a ese tipo de condiciones”, lamentó.

Para el investigador, no solo se trata de la falta de presencialidad. “Aún que le dieran computadoras a todo el mundo, una excelente conexión a internet, el problema educativo está allá, pues se relaciona con la infraestructura”.

“Nosotros hicimos un centro comunitario para aminorar los impactos del sistema educativo, pero no hemos encontrado formas de volver a nuestras actividades normales. Creo que la sociedad civil va a tener que organizarse y encontrar nuevas formas de comunicación creativa”, opinó.

Entre los planes a futuro en el centro comunitario de Canicab, Mijangos Noh ha planeado un proyecto teatral, aunque su desarrollo dependerá de las condiciones sanitarias. Pese a los esfuerzos que ha mermado la pandemia, no deja de ser interesante ver cómo las familias han recuperado terreno educativo al pasar más tiempo con sus hijas e hijos.

“A final de cuentas la educación es una relación humana constructiva que tiene que ver con cómo nos socializamos y vamos construyendo una forma de relación socialmente aceptable, sana y constructiva. Así se dan estos fenómenos, como productos inesperados de la pandemia”, concluyó.

Edición: Elsa Torres


Lo más reciente

Segundo debate presidencial: horario, nuevo formato y moderadores

El INE realizó ajustes a fin de incentivar la confrontación entre aspirantes

La Jornada Maya

Segundo debate presidencial: horario, nuevo formato y moderadores

Pescadores de Atasta alistan denuncia contra Pemex por contaminación

Acusan que fugas en los ductos de gas perjudican al medioambiente y a la pesca

Gabriel Graniel Herrera

Pescadores de Atasta alistan denuncia contra Pemex por contaminación

¿Demandar al Gobierno? Un paso adelante por la lucha contra el cambio climático

Gobernanza y sociedad

La Jornada Maya

¿Demandar al Gobierno? Un paso adelante por la lucha contra el cambio climático

Concede Canadá la extradición de León Trauwitz, acusado de ‘huachicoleo’

El reclamado cuenta con 30 días para apelar dicha resolución

La Jornada

Concede Canadá la extradición de León Trauwitz, acusado de ‘huachicoleo’