“Es tonto pensar que los panistas imitan las mañas del tricolor”, sostiene

Verónica Camacho Chávez
La Jornada Maya

Mérida
11 de agosto, 2015

Decir que el PAN está mal y que ha perdido credibilidad por querer imitar las malas prácticas del PRI es desconocer a la militancia, afirma Raúl Paz Alonso, candidato a la presidencia estatal del [i]blanquiazul[/i].

Considera “tonto pensar de esa forma”, pues la gente que está con el partido tiene muy arraigada la doctrina panista. “No me atrevería a decir eso nunca, porque conozco a las personas y más a las del interior del estado: es gente buena que ha estado en el PAN 60 años luchando sin pedir nada a cambio. Los que quieren imitar esas prácticas son los que quieren imponer su voluntad, y si no te dan permiso no puedes hacer nada”.

Explica que las doctrinas de todos los partidos plantean ayudar a la gente que más lo necesita y con su ideología lo logran, pero si el PAN quiere ganar elecciones debe hacer cosas mejores, porque tiene mucha gente buena luchando. “Decir que se imitan las malas prácticas del PRI es no conocer al PAN ni a su gente. Hay muchos liderazgos de gente buena en los municipios, ¿cómo se atreven a decir que el PAN realiza las mismas prácticas?”

Afirma que busca hacer del PAN un partido ganador, pero debe adecuarse a la época, porque ya no se puede ganar como hace 15 años, cuando éramos gobierno. “Los gobiernos del PAN, con Vicente Fox y Felipe Calderón, fueron buenos, aunque cometieron errores; pero gobernar no es de gente perfecta, sino de personas dispuestas a ofrecer su talento para cambiar la situación del país. Por eso estamos aquí, queremos trascender, nos apasiona y nos gusta”.

Señala que él y varios líderes hicieron un ejercicio de unidad, dejaron atrás muchas diferencias y lograron destacar las coincidencias para hacer un partido más fuerte para las elecciones de 2018, “porque tenemos muchas probabilidades de ganar, de recuperar espacios. Nos dimos cuenta que uniendo liderazgos podemos ser una fortaleza para este proyecto”.

Raúl Paz afirma: “lo que necesita el presidente de cualquier partido –sobre todo del PAN– es estar cerca de la gente, que dialogue y construya la unidad que tanta falta nos hace”.

Explica que cuando le ha tocado ceder en un proyecto político para ser más competitivos, a pesar de que es difícil lo ha hecho pensando en la institución y en la gente, en los buenos gobiernos.

El diputado federal buscó ser candidato a alcalde de Mérida, y terminó apoyando el proyecto del presidente municipal electo Mauricio Vila Dosal.

Reconoce que la pérdida de alcaldías y diputaciones en Yucatán es reflejo de la desunión que se vive en el PAN, y eso aleja a mucha gente que quiere ser factor de cambio en su comunidad.

“Antes, la primera puerta que tocaba la gente era la del PAN y ahora nos ven separados. La idea de construir destruyendo echó raíces en el partido y eso no nos deja nada, por eso me ví obligado a luchar contra eso. Queremos un partido útil para la sociedad.”

Acerca de los resultados que obtuvo el PAN en las elecciones de junio, Paz Alonso indica que algo se hizo mal, sobre todo en el interior del estado, pues hace mucho que no ganan una diputación federal, perdieron alcaldías y les cuesta mucho refrendar las que se logran.

“No hay que buscar culpables, pero en la dinámica olvidamos el tema. Debemos voltear a verlo, porque en los municipios se necesitan mejores gobiernos y es donde la gente más requiere de estabilidad y que se apliquen políticas públicas solidarias y subsidiarias, que respeten la dignidad de la persona y generen el bien común. Ahí tienen más impacto porque ese pequeño cambio se vuelve más grande para la comunidad.”
Señala que es muy distinto hacer política en los municipios y en la capital. En los primeros todos se conocen y saben quién vota por quién, y las consecuencias de ser de uno u otro partido son terribles, porque un alcalde priísta llega a negar servicios de traslados médicos a los panistas.

Considera que sólo si hay unidad, si los gobernantes dialogan y están cercanos a la gente, “tendremos altas posibilidades de ganar varias alcaldías y la gubernatura, pero tenemos que hacer las cosas con voluntad, trabajo y esfuerzo, y no intentarlo dos o tres meses antes de la elecciones, el trabajo debe comenzar el 17 de agosto.

“Nuestra fortaleza es la democracia interna, pero por la forma de actuar de algunos compañeros se volvió debilidad. Hay que ver al PAN como instrumento de cambio y reforzarlo, no debilitarlo en aras de ser un gran líder. Por gente así se han destruido instituciones políticas y religiosas. Debemos cambiar esa dinámica”.

Paz Alonso señala que el PAN vive un momento histórico: es la primera vez que la militancia elegirá a sus dirigentes mediante voto directo, y las personas que siempre han trabajado para el partido, que han caminado de casa en casa bajo el rayo del sol y saben qué quieren para el [i]blanquiazul[/i] son las que decidirán su destino.

Respecto del trabajo del gobernador priísta Rolando Zapata Bello, considera que le faltan resultados concretos. “Ha mejorado muchas cosas en comparación con el gobierno de Ivonne Ortega Pacheco, pero no ha logrado reducir la pobreza ni hay mejoras en la economía; en cambio, es notable la creciente inseguridad.

“Además, durante las pasadas elecciones repitió actitudes que parecían superadas; sin embargo, nuestra relación con el gobierno debe ser de interlocución: ver en qué coincidimos para ver qué podemos construir por el bien de los yucatecos. El PAN tiene claro cuales políticas públicas priístas debemos cambiar porque no dan resultados.”

Paz Alonso dice que es posible que no se refleje en el día a día si la gente está contenta con el gobierno, pero al no ver bienestar ni mejoras en su bolsillo ni en la economía familiar, además de la falta de oportunidades, se manifiesta el descontento. “Cualquier política pública que no mejore tu calidad de vida deja mucho que desear; los yucatecos somos exigentes con nuestros gobiernos y nos gusta que las cosas se hagan bien”.

Acerca del cambio de gobierno en Mérida, dijo que Renán Barrera recibió una casa destrozada y mucho de lo que sembró el alcalde saliente lo podrá cosechar Vila Dosal. “Ha sido un ayuntamiento con muchos defectos pero con más virtudes, si se ve desde la perspectiva de cómo lo dejó la anterior administración”.

El candidato a la presidencia estatal del PAN sostiene que una de sus prioridades será atender a los mayahablantes y que en su proyecto de trabajo está la creación de una secretaría de pueblos indígenas que encabezaría Lucio Balam, ex alcalde de Chemax, muy cercano a esos grupos, habla maya y es líder panista desde 1996.
Los mayahablantes “son prioridad porque se trata de gente buena, noble y trabajadora; su cultura es admirada en todo el mundo. Todos tenemos raíces mayas y debemos estar orgullosos de ello”.

Acerca del medio ambiente considera que se debe “seguir fomentando la cultura verde entre la población y las empresas. Los integrantes de las nuevas generaciones son los más atentos a esos temas y con políticas públicas y reformas legales podríamos hacer cambios importantes, como la movilidad urbana en Mérida. Hay muchos automóviles porque el servicio del transporte es pésimo; si fuera más eficiente tal vez los ciudadanos no usarían tanto el coche y con eso ayudaríamos a reducir la contaminación”.

Indica que también es importante llegar a acuerdos con los desarrolladores inmobiliarios, crear un plan de áreas verdes atractivo para sus negocios y de esa forma que sea ganar-ganar para todos.

Paz Alonso dice que la influencia del nuevo alcalde Mauricio Vila Dosal es importante e influye positivamente, por ser la posición más alta en el partido, pero sobre todo porque se envía un mensaje de unidad y de llegar a acuerdos, de “que queremos un partido unido, que somos una generación de políticos que entiende que de los errores se aprende y que si perdimos en 2007 fue por el radicalismo de creernos dueños de la verdad. Teníamos un buen gobierno estatal, pero los dueños de las verdades se pelearon, faltó trabajo político. No quito méritos a su liderazgo ni a su trabajo, pero en 2007 la regaron. Finalmente ellos no perdieron, no perdió el PAN, perdimos todos la oportunidad de continuar con buenos gobiernos”.

Si gana la presidencia estatal del partido ofrece “la regeneración del PAN, con una nueva cara, que trabaje en las calles, activo, que siga capacitando y enseñando nuestra doctrina para ser más competitivos.

“Nuestra obligación es crear un PAN moderno para que la gente vuelva a mirarnos y que sea la cuna de quienes desean ver cambios en su comunidad. Debemos mostrarnos unidos y ser un partido innovador, que dialogue, marque sus diferencias y cuando haya coincidencias construya y no destruya. La gente está harta de los políticos que se sienten dueños de la verdad. Quieren ver cambios y si no los hacemos corremos el riesgo de desaparecer”.