En Tulum nos adaptaremos a la nueva normalidad con facilidad: Ortiz Mena

Rosario Ruiz
Foto: FB Hotel Encantada Tulum
La Jornada Maya

Playa del Carmen, Quintana Roo
Miércoles 27 de mayo, 2020

Las características naturales de los hoteles costeros de Tulum, al ser de pocas habitaciones, con espacios abiertos y una oferta saludable, propiciarán que sea más fácil adaptarse a las nuevas medidas sanitarias, además de que éstas deberán apegarse al destino, pues no debemos olvidar que lo que nos distingue es el trato, no podemos ocultar nuestra sonrisa, señaló el presidente de la Asociación de Hoteles de Tulum, David Ortiz Mena.

“Nuestro destino naturalmente cumple con muchas de las cosas que serán expectativas del viajero, por ejemplo en Tulum muchos de los spas que tenemos están al aire libre, en la playa misma, entonces me parece que a mediano y largo plazo nuestro destino va a tener todo lo posible para ser demandado, deseado y salir adelante. Hablando de sana distancia, tenemos la fortuna de tener hoy hoteles que tampoco son masificados, al contrario, bien pueden ofrecer una experiencia con sana distancia de una manera muy distinta a un hotel urbano o de otros destinos del mismo Quintana Roo, y creo que debemos demostrar esa parte de Tulum como una de nuestras fortalezas”, destacó.

Ortiz Mena consideró fundamental seguir extremando precauciones hasta la autoridad sanitaria lo indique. El regreso a las actividades, dijo, será progresivo, y lamentó que el turismo no sea considerado una actividad esencial, “esto es lamentable, porque creo que todos estaríamos de acuerdo en que el turismo es esencial para la economía de nuestro estado. Hemos visto a nivel federal cómo otros sectores, por ejemplo el automotriz, el de la construcción o la minería por considerarse esenciales han podido comenzar a reactivar sus actividades”. Consideró un acierto del gobierno del estado y la secretaría de Salud pugnar para que se considere al turismo como esencial.

[b]Adecuación de protocolos[/b]

En cuanto a la hotelería, destacó que buscan cumplir todos los protocolos sanitarios necesarios para preparar los espacios y servicios en general para ofrecer un ambiente seguro para sus colaboradores y visitantes. Sin embargo, cada centro de hospedaje deberá adecuar los protocolos a su realidad: “uno de los puntos que preocupan son aquellos hoteles que proveen de transporte a su personal, este transporte es muy importante que tenga sana distancia y eso es ejemplo de la nueva normalidad a la que hay que adaptarse”.

En cuanto a probables fechas de apertura de hoteles, mencionó que hay variaciones: “estimo que vamos a estar en condiciones de tener una relajación de las restricciones entre el 8 y 10 de junio. Hay hoteles que advierten una apertura con fecha 15 de junio y hay otros que han decidido aguantar su apertura hasta el 1 de julio, esto porque Estados Unidos prolongó las restricciones en su frontera terrestre hasta el 22 de junio”.

“Esto es relevante porque el norteamericano es mucho de percepción y si su mismo Gobierno se lo advierte esto puede incidir en los deseos de viaje. En un inicio veremos un mercado mucho más limitado, seguramente será el nacional, seguido por el norteamericano, en particular la costa este de EU y probablemente el estado de Texas”, destacó.

“En el turismo vamos a tener que hacer todo lo posible por ofrecer condiciones seguras, pero aquí hay que recordar algo: quienes vienen a un destino de playa lo hacen por recibir una experiencia vacacional, entonces sí hay que hacer todo lo posible por tener los protocolos que procuren un ambiente seguro pero sin olvidarnos de que somos destinos de playa, yo no me imagino un viajero ir a la playa para luego allí asolearse con una mascarilla N95”, mencionó.

[b]Calidez del servicio, lo que distingue a Tulum[/b]

Recalcó que la calidez en el servicio también distingue a Tulum como destino, “nos diferencia de otros destinos caribeños, en ese sentido gran parte del personal necesita recibir a la gente con una sonrisa, ese factor humano tiene que seguir existiendo; hago alusión a esto para recordar que finalmente somos hoteles, y hoteles no de una gran urge, ni de negocios, somos hoteles de relajación de un destino caribeño, no confundamos lo que son restricciones sanas con que también tenemos que mostrar que el destino está listo para recibir a sus visitantes, me parece importante hacer esa diferenciación”.


Edición: Enrique Álvarez