Clare Tawell es madre de una niña sorda y nunca consiguió en tiendas de juguetes un muñeco con el que su hija pudiera identificarse, por ello decidió crear la marca Bright Ears UK, que muestra la gran diversidad de discapacidades y afecciones médicas que pueden padecer los menores.
Tawell, originaria de Inglaterra, comenzó a crear muñecas que usaran aparatos para la discapacidad auditiva, con los que su hija Matilda que entonces tenía 4 años pudiera identificarse, sin embargo, poco a poco fue fabricando juguetes con discapacidad visual, con labio leporino, sondas de alimentación y hemangiomas (marcas de nacimiento).
Las modificaciones son realizadas en muñecos para niños y niñas y Clare también incluye la diversidad de tonalidades de piel.
La mujer es tecnóloga de radiación médica, pero ahora se ha enfocado más en la fabricación de muñecos, que son elaborados a solicitud de los padres que buscan el empoderamiento de sus hijos.
Todos los accesorios son hechos a mano para que se adapten a la perfección a los muñecos.
En cuatro años de existencia, Bright Ears UK ha vendido más de dos mil piezas en su tienda en línea.
La mujer ha declarado a medios ingleses que el objetivo de estos juguetes es hacer que los niños se sientan “normales” y que al identificarse con los muñecos incremente su confianza y autoestima.
Además de ser una tienda de juguetes Bright Ears UK es una asociación sin fines de lucro para promover en las guarderías y escuelas el uso de muñecos inclusivos y así conseguir que los menores se acostumbren a la diversidad.
Clare asegura que las ganancias obtenidas con las ventas de estos juguetes son invertidas en programas que ayudan a niños con estas características físico-médicas.
La cuestión agraria, estandarte de la Revolución Mexicana, se abandonó de paulatinamente desde los años ochenta
Francisco J. Hernández y Puente
Urge aprender de quienes andaron por la vida antes que nosotros
Margarita Robleda Moguel
Gobernanza y Sociedad
La Jornada Maya
¿Qué podemos aprender de la experiencia de pescadores veteranos para el futuro del litoral local?
La Jornada Maya