Setenta y dos personas han muerto y mil 234 han sido arrestadas en los disturbios desencadenados por el encarcelamiento del ex presidente Jacob Zuma la semana pasada, informó ayer la policía de Sudáfrica.
En un comunicado emitido por la noche, el mayor general de la policía Mathapelo Peters afirmó que muchas de las muertes fueron causadas por estampidas de personas cuando se saqueaban las tiendas. Dijo que se están investigando 27 muertes en la provincia de KwaZulu-Natal y 45 en la de Gauteng.
Además de las personas aplastadas, dice que la policía está investigando las muertes que parecen haber sido causadas por explosiones cuando la gente intentaba forzar los cajeros automáticos y otros tiroteos.
"La policía descubrió diez cuerpos el lunes por la noche. Estas personas murieron en una estampida", dijo a la prensa el primer ministro David Makhura.
El presidente Cyril Ramaphosa anunció el lunes el envío de tropas para auxiliar a una policía desbordada por los disturbios y "restaurar el orden".
Los primeros incidentes, con rutas bloqueadas y camiones incendiados, se produjeron el viernes, al día siguiente del encarcelamiento de Zuma, condenado a una pena de prisión en firme por desacato a la justicia.
Los hechos de violencia se propagaron luego durante el fin de semana en la aglomeración de Johannesburgo, capital económica del país.
Los incidentes continuaron en la noche del lunes a martes, constataron varios periodistas de la AFP, especialmente en Soweto, inmenso township (áreas desfavorecidas reservadas a personas "no blancas") al oeste de Johannesburgo.
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Edición: Laura Espejo
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