El cubano Andy Cruz derrotó el domingo a Keyshawn Davis para ganar el oro en el peso ligero masculino, en una emotiva última jornada de boxeo en los juegos de Tokio, en la que se vieron lágrimas de alegría y de dolor, y mucha destreza en el cuadrilátero para decidir las cuatro últimas medallas.
Cruz venció al estadunidense Davis por decisión dividida, en tanto la irlandesa Kellie Harrington también se colgó la medalla de oro en peso ligero tras imponerse en un apasionante combate a la brasileña Beatriz Ferreira.
El cubano Cruz ganó cómodamente la primera ronda del oro en peso ligero masculino, pero cayó en la segunda; sin embargo, se guardó lo mejor para el final, al superar a Davis para hacerse con el título.
"Mi táctica, mis golpes, fueron muy fuertes", dijo a periodistas. "Disfruté de mi boxeo. Fue mi mejor actuación y salió del corazón".
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El título femenino del peso medio lo ganó la británica Lauren Price, quien superó ampliamente a la china Li Qian. En el último combate de los Juegos, el uzbeko Bakhodir Jalolov fustigó al estadunidense Richard Torrez Jr.
En la primera pelea de la jornada, Harrington se esforzó al máximo tras perder por poco el primer asalto antes de encontrar su ritmo. Aprovechó su mayor altura para golpear y mantenerse fuera del alcance de su dura oponente.
La joven de 31 años se convirtió en la primera mujer irlandesa en ganar el oro desde Katie Taylor en 2012.
"No tengo palabras. El trabajo duro, la dedicación, el sacrificio que ha supuesto esto, los momentos de soledad. Las lágrimas", dijo una emocionada Harrington a periodistas. "Nunca tuve expectativas (de oro). Sólo vine con la expectativa de rendir", añadió.
Edición: Emilio Gómez
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