Un juez de Singapur dictó una sentencia a muerte contra un hombre de 41 años por posesión de un kilogramo de mariguana en un puesto fronterizo.
Omar Yacob Bamadhaj fue detenido en 2018 en un sitio de control en la frontera con Malasia a bordo de un automóvil en el que resguardaba tres paquetes de cannabis.
El acusado y su padre, quien también viajaba en el vehículo, aseguraron desconocer que transportaban esos paquetes, sin embargo, ante diversas contradicciones en las declaraciones, el juez falló en su contra.
Bamadhaj fue sentenciado a muerte en la horca en febrero de este año, sin embargo, apeló la decisión del juez, pero perdió la apelación luego de que la Corte considerara que hubo un buen manejo del juicio.
El consumo de mariguana está prohibido en Singapur y es sancionado con prisión y hasta con azotes. El tráfico de drogas, que es el delito que se le imputó al hombre, se sanciona con pena de muerte.
De acuerdo con información del medio Channel News Asia, el padre del sentenciado no recibió ningún castigo.
Omar al principió admitió que sí conocía el contenido de los paquetes y dijo que aceptó transportarlos porque estaba desesperado por dinero, sin embargo, en otra declaración dijo que tal vez unos conocidos metieron la droga en su vehículo y que aceptó el delito porque fue obligado por los oficiales que lo detuvieron, quienes amenazaron con colgarlo a él y a su padre.
La organización Amnistía Internacional condenó la decisión del juez, la cual, argumentan, viola las salvaguardias internacionales y atenta contra los derechos humanos.
La Corte no informó sobre la fecha en la que se llevará a cabo el proceso.
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