Cam Newton fue “Superman” hace cinco años para las Panteras de Carolina.
Con 45 touchdowns totales (35 por pases y 10 por tierra), cerca de 4 mil yardas por aire y más de 600 por tierra, condujo a los felinos al primer lugar de la Conferencia Nacional y a la segunda aparición en el Súper Tazón de su historia, tras anotar 80 puntos en dos juegos de playoffs. Luego de alcanzar las diagonales, seguía una celebración en la que el Jugador Más Valioso ese año recordaba al “Hombre de Acero”.
¿Se podrá acercar Newton a ese nivel con los Patriotas? Si está sano -en las dos temporadas anteriores batalló con lesiones-, no hay razón para pensar que no será así. Varios expertos piensan de esa forma y otro buen tanto está entusiasmado por lo que el ganador del Heisman y campeón colegial puede aportar en Foxboro.
Con el joven Jarrett Stidham remplazando a Tom Brady, el panorama lucía complicado para los seis veces monarcas. Pero con Cam al 100%, los “Pats” tendrían un arma pocas veces vista en la NFL, un pasador con gran estatura, físico y habilidad para correr. El décimo “Súper Domingo” en la era de Bill Belichick no suena tan descabellado.
Juntar el genio del coordinador ofensivo Josh McDaniels -ya adaptó sus esquemas a un mariscal de campo similar a Newton, Tim Tebow-, y Belichick y el talento especial de Newton mantendría a los Patriotas como un rival formidable. Año con año, Nueva Inglaterra es de los conjuntos mejor preparados, que más provecho le sacan a su róster y de los que más formas de ganar encuentran, y ahora tendrá a dos de los individuos más motivados en la liga, quarterback y entrenador, que buscará confirmar que su sistema genera triunfos aún sin Brady. “Esto se trata de respeto”, dijo Newton, quien firmó por una temporada y 1.05 millones de dólares (puede obtener hasta 7.5 millones). La dupla representa una amenaza para los Jefes de Patrick Mahomes, el quarterback de cerca de 500 millones, que intentan comenzar una dinastía.
El año anterior, los Patriotas, sin un gran arsenal ni mucho “punch”, lograron doble dígito en victorias y el título divisional. Ahora, con Cam, el cielo es el límite.
Newton ya disputa el puesto con Stidham, quien conoce mejor la ofensiva. Belichick siempre genera competencia y sus equipos son mejores por ello.
Sin embargo, la pandemia de coronavirus es un obstáculo mayúsculo para todo el futbol americano, donde todavía se están acordando los protocolos de salud. No habrá partidos de pretemporada y los equipos estarían completos entrenando hasta mediados de agosto. Esa inusual preparación afectará especialmente a elementos con nuevos conjuntos como Newton, a entrenadores y asistentes en nuevos clubes y a novatos. Por si fuera poco, el calendario (.537 es el porcentaje de ganados y perdidos de sus rivales en 2019) será otro reto gigantesco para los Patriotas, que también tendrán que lidiar con bajas significativas.
Edición: Ana Ordaz
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