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La Jornada
08/07/2025 | Madrid, España
Armando G. Tejeda
Al más puro estilo Donald Trump, la extrema derecha española, de la formación política Vox, amenazó con poner en marcha un plan de “deportación masiva” de migrantes “ilegales” e, incluso, de extranjeros nacionalizados españoles que hayan cometido delitos de forma sistemática.
De llevar a cabo este plan, la supuesta expulsión de extranjeros podría ser superior a los 2 millones de personas, que a día de hoy es remota dada la presencia política de Vox en el país, es tercera fuerza y muy detrás del derechista Partido Popular (PP) y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE).
El caso de varias violaciones de mujeres a manos de ciudadanos extranjeros, sobre todo una ocurrida recientemente en Alcalá de Henares, en donde una mujer de 21 años fue agredida sexualmente vaginal y analmente supuestamente por un migrante originario de Mali, ha despertado una serie de protestas sociales azuzadas por grupos de extrema derecha. Vox, que tiene el tercer grupo parlamentario en el Congreso, fue más allá y propuso una “deportación masiva” de extranjeros ilegales que delincan y que afecte también a “nacionalizadas españoles” a los que les revocarían esa condición.
La vocero del grupo Vox en el Parlamento, Pepa Millán, justificó su plan en que “tenemos que reivindicar nuestro derecho a permanecer como pueblo, queremos seguir siendo España. Y por eso exigimos la inmediata expulsión de los migrantes ilegales en España".
La primera en proponer estas medidas fue la diputada Rocío de Meer, quien aseguró que “es necesaria una deportación masiva de inmigrantes para preservar la identidad española. Están abiertas nuestras fronteras. Por lo tanto, de 47 millones de habitantes que tiene nuestro país más o menos más de 7 millones –porque tenemos que tener en cuenta la segunda generación–, 8 millones de personas han venido de diferentes orígenes en un muy corto periodo de tiempo”.
El presidente del gobierno, el socialista Pedro Sánchez, se refirió a la polémica al sostener en un mensaje en las redes sociales que “no olvidemos de dónde venimos para entender quiénes somos. España fue durante décadas una tierra de partida, de esfuerzo fuera de nuestras fronteras. A día de hoy es tierra de acogida, y quienes llegan contribuyen con su esfuerzo a construir una mejor España”. Este mensaje fue reforzado por la vocero del gobierno, Pilar Alegría, quien aseguró que “España es un país de acogida. Esto que está planteando Vox no va a suceder”, tras criticar los pactos parlamentarios y de gobierno que tiene el PP con Vox en algunas comunidades autónomas y municipios.
Edición: Fernando Sierra