de

del

Jhonny Brea
Foto: Enrique Osorno
La Jornada Maya

Viernes 7 de junio, 2019

Ni hablar. Ya se me adelantaron. No digo las lluvias, que esas las estaba esperando desde el 3 de mayo para que el calor fuera menos, pero de todas formas la temporada estuvo fatal. Ahora falta que las inundaciones sean menos.

Pero en realidad me refería a que me tardé en armar mi bajador. Después de que hice mi elogio del ciricote, recibí varios mensajes invitándome a conformar la Sociedad Secreta de Aprovechadores del Ciricote Sembrado en Espacios Públicos. “Nada de política, no va a ser como el Gremio de Bajadores de Tamarindo de la Acera Poniente del Paseo Montejo que se aparece en las elecciones de la CTM”, me explicó un ex alcalde muy animado para salir a medianoche embozado en busca de los amarillos frutos. De todas formas, por lo que he podido ver, ya surgieron aprovechadores no afiliados. Lo malo es que no invitan al dulce. Van a ver, alguien les va a destapar la olla con el almíbar y les van a salir arrugados.

Honestamente no he salido porque ya es también la época de irse preparando para los festivales de fin de curso. Por más, hay carreras para ver las telas, cotizar modistas, meterse a las mercerías en busca de canutillo, chaquiras, lentejuelas y demás luminiscencias que dejarían de existir si los padres de familia nos organizáramos para pedir que las declaren plásticos más tóxicos que los popotes, además de armar sabrosas discusiones en los respectivos grupos de WhatsApp con los demás padres de familia. Ustedes saben, las labores propias de mi sexo.

También, tanto La Xtabay como yurstruli nos estamos preparando mentalmente para los respectivos festivales de fin de cursos. Para ese día tendremos ya se habrán calmado las aguas en los grupos de padres de familia. En mi caso, con aplomo de macho omega grasa en pecho, espalda peluda, nalga revocada, abdomen de lavadora y bebedor de cerveza light, cada que coincido con alguno de mis compañeros de infortunio con algún otro papito le digo que es cosa del calor y que todos ya necesitamos un descanso de la escuela, empezando con el personal docente. Es en serio, alguien tendría que promover alguna iniciativa legal para que todo aquel mayor de edad que llegue a los meses de la canícula debe tener el derecho inalienable para realizarse por lo menos un estudio semanal en el Centro de Atención Naturista y Terapia Integral de la Neurosis Ansiosa (Cantina, por sus siglas en inglés).

Lo bueno es que parece que este verano habrá ahorros. Con eso de que ahora habrá uniforme “neutro”, La Cutusa andará de pantalones en la escuela. Eso por simple Estrategia Integral de Defensa de la Quincena: llevan mucho menos tela que las faldas y por consiguiente salen más baratos; y si al Kizín se le ocurre pedir falda, en cuanto escuche que va a salir de su gastada se le van a quitar las ganas de usar una. Eso sí sería peligroso además. El primer día me lo iban a devolver por organizar a sus compañeros para hacer un live action de Corazón Valiente y repetir la escena de las tropas de Wallace desafiando a los ingleses. En casa, lo único escocés que entra es porque está embotellado de origen.

Pero después estaremos en los preparativos para la temporada, los todavía afortunados que puedan disfrutar de ella, mientras los demás nos preparamos para una escapada a la playa, o una salida de fin de semana, y luego nos preparamos para volver al trabajo y la escuela.

[b]Macho omega que se respeta[/b]

Sabes que tu lavadora está dando las últimas cuando ya eres capaz de diagnosticar una fuga en las mangueras porque la pieza de donde se agarran en la base ya tiene un remedio hechizo, y no te quedan ganas de volver a llamar al técnico.

[b][email protected][/b]


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