de

del

Gretty Alcocer
Foto: Cuartoscuro
La Jornada Maya

Martes 26 de septiembre, 2017

Los [i]millennials[/i] se convirtieron en voluntarios inesperados tras el sismo. Así reza la nota transmitida el día 25 de septiembre durante uno de los noticieros de la cadena Televisa y ésta no ha sido la única de este tipo. Desde los hechos ocurridos el pasado 19 de septiembre, esta declaración ha sido expresada en diversas notas periodísticas y de opinión.

En el colectivo nacional, siempre ha existido un resentimiento irracional hacia los [i]millennials[/i]. Se nos tacha de una generación indiferente e improductiva. Por lo que nuestra actitud tras el sismo que afectó el centro y sur de México, parece ser incomprensible para otras generaciones. Sorpresa y desconcierto surge en la sociedad mexicana al ver al [i]millennial[/i] dedicado al rescate y protección de su prójimo sin descanso, cuando es precisamente por esto, por lo que esta generación ha pugnado durante años.

Lo anterior no es una actitud nueva e inesperada del [i]millennial[/i]. A los que lo afirman, me atrevo a preguntarles: ¿acaso no estuvimos ahí para las elecciones de 2006 y 2012, tomando las calles, pidiendo a gritos una elección limpia en búsqueda de un cambio favorable? ¿acaso no somos abanderados de movimientos sociales de importancia, tales como la equidad de género, respeto a la diversidad sexual, por mencionar sólo algunos? ¿acaso no somos los primeros en levantar la voz cuando sucede un acto de impunidad, como el caso de Ayotzinapa y, más recientemente, el asesinato de Mara Castilla?

Los [i]millennials[/i] no somos inútiles. No somos apáticos. México nos importa, y mucho. Esta ayuda inesperada que todos parecen alabar, ha estado ante sus narices y a su servicio todo este tiempo. Así que, quisiera dejar claro una cosa, nosotros los [i]millennials[/i] no somos voluntarios inesperados. Somos, y siempre hemos sido, voluntarios ansiosos por ayudar. Sin embargo, no son notas periodísticas alabándonos, reconociendo nuestro esfuerzo y dándonos las gracias lo que necesitamos; ahora al darse cuenta que no somos sus enemigos y estamos más que dispuestos para rescatar a este país: ¿qué sigue?

[b][email protected][/b]


Lo más reciente

Centro Contemporáneo del Mayab, antes una decadente oficina, es un ejemplo del Renacimiento Maya

El oficio de vivir

Andrés Silva Piotrowsky

Centro Contemporáneo del Mayab, antes una decadente oficina, es un ejemplo del Renacimiento Maya

El tábano amarillo, una fiera que pica

Especial: Fauna Nuestra

La Jornada Maya

El tábano amarillo, una fiera que pica

—¿En el mundo hay más tristeza o más felicidad?

Las dos caras del diván

Alonso Marín Ramírez

—¿En el mundo hay más tristeza o más felicidad?

Se buscan terrenos baratos

Noticias de otros tiempos

Felipe Escalante Tió

Se buscan terrenos baratos