Los yucatecos crecimos con palabras mayas como parte de nuestro lenguaje. Cuando fui a visitar a mis abuelos que vivían en San Antonio Texas, alguien de Monterrey mencionó la palabra ombligo y yo pregunté qué era. “¿No sabes? Tú tienes uno”. -respondió. “¿Yo?” -pregunté preocupada. “¿Dónde, dónde? ¿Desde cuándo?” La niña señaló mi estómago y yo respondí aliviada: “Ah, mi tuch”.
Cuando llegó la televisión nacional comenzamos a perder la posibilidad de llamar a las cosas en “lenguaje cifrado”, frente a los visitantes de otros estados, con palabras como: ”xic, xix, tush, loch, nojoch, estar poch, cara de pek…”. Algo hermoso se fue volando cual turíx.
El maya es tan rico que hasta las inflexiones de la voz cambian la misma palabra. Es así como la palabra chuc me trae recuerdos deliciosos desde mi infancia, que la traduce en remojar. Por lo que al entrevistar a doña Vilma Cool Chuc, me hizo investigar el sentido verdadero, y salió “asado al carbón”. Aunque parece que hay otras interpretaciones. Le preguntaré a la poeta Sasil Sánchez Chan, editora de K'iintsil, de nuestra Jornada Maya.
Comenzó con mis visitas a Dzibalché, Campeche a la maestra Blanca Alicia Pech Salazar, extraordinaria maestra de español de la secundaria. Imagino que ella, con el deseo de agradecerme el apoyo, pensó que me haría muy feliz una blusa típica con ranas bordada sobre tela fiusha. No se equivocó. Las blusas continuaron y la belleza y cuidado con el que la artesana las bordaba me hizo desear conocerla para reconocérselo.
La cercanía de la Filey me hizo recomendarle a la directora Teté Mezquita un hipil con escudos de la UADY. Le pedí los logos y cuando los vi, me di cuenta de que sería una meta imposible de alcanzar. La UADY cumplió más de 100 años hace unos días, el logo es poderoso por la historia que carga. Ahí entendí que la experta no era yo, lo tendría que decidir doña Vilma Cool Chuc.
Grande fue mi sorpresa, ella, apoyada por su hermanita Leticia, bordaron una obra de arte. Pensé en las máquinas que ahora le están robando trabajo a las artesanas y que la gente las paga por baratas. Pero definitivamente, sus productos no tienen la energía amorosa que las bordadoras imprimen, mientras sueñan con “ya sabes quién”. Sueños que enaltecen, abrazan, fortalecen.
Le pedí que me contara un poco de su vida: ¿cómo llegó hasta ese punto de excelencia? Los escudos de la UADY que están perfectamente alineados y la copia del logo, exacta, me hicieron pensar que doña Vilma era una graduada de la Universidad de las Bellas Artes, elaborando amorosamente el logo de su alma mater.
Me contó que, en su juventud, estudió corte y confección en el internado cercano. Que eso le permite armar el trabajo. Que le gusta el dibujo, otras personas tienen que mandar a que se los dibujen, pero que ella disfruta hacerlo. Que antes era más difícil bordar con maquina de pedal, tenía que estar moviendo el aro donde se bordaba. Ahora, con máquina eléctrica, es mucho más fácil. A doña Rosa Chuc, su mamá, que aprendió de su abuela, le enseñó a bordar y le gustó. Su hermanita Leticia, trabajó en la maquiladora y aprendió a utilizar las máquinas eléctricas y después de un tiempo decidió regresar a su casa y ahora se apoyan.
Conocí a doña Rosa Chuc, urdiendo una hamaca en la terraza de atrás. Ella es la responsable de hacer de comer. Doña Vilma cierra su máquina a las 4 de la tarde y la cambia, para descansar, por una hamaca que está urdiendo. Dice que prefiere bordar que urdir, que no aguanta más de dos vueltas. Le pregunté qué sentía cuando terminaba un trabajo tan hermoso. Me respondió que se siente contenta. “Ahora, hay menos artesanos, no quieren bordar, mejor van a Mérida a comprar y luego van a las ferias que organiza el gobierno, como si fueran artesanos, a venderlas”.
El pasado 19 de marzo, la JM publicó en primera plana la declaración “el bordado maya yucateco como patrimonio cultural intangible del estado”.
Las mujeres Chuc de Dzibalché Campeche nos regalan el disfrute de su obra como el recuerdo del pan bueno (fino) remojado en un exquisito chocolate caliente batido a mano.
¡Basta de regatear el trabajo ARTE-sanal! ¡Es nuestra identidad!
Lea, de la misma autora: Ambición vs intuición
Edición: Fernando Sierra
Este año se centrará casi por completo en la sastrería, con un enfoque especial en el dandismo negro
The Independent
Gregorio X decretó en 1274 que los cardenales recibirían solo ''una comida al día''
Ap
Tel Aviv reanudó su ofensiva el 18 de marzo, poniendo fin a dos meses de tregua con Hamas
Afp
El personal estará autorizado para detener a los inmigrantes que crucen ilegalmente
Ap