Espeleólogos de la Riviera Maya anunciaron el hallazgo de vestigios arqueológicos en el tramo 5 Sur del Tren Maya, los cuales -dijeron- no han sido preservados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH); por su parte, el instituto informó mediante un comunicado que el sitio sí se tiene registrado y se están tomando las medidas para su estudio y preservación. Sugirió a los exploradores tener “prudencia y mesura” al hacer denuncias en redes sociales.
En su cuenta de Twitter, la espeleóloga @ainatbruja dio detalles del hallazgo: “la encontramos (la cueva) el día 19 de abril, no llevábamos equipo de rappel para poder bajar, por eso ese día solo marcamos el punto GPS para poder regresar. El acceso era difícil pero no es justificación. El poco tiempo que les están dando para hacer el registro y rescate de tantos y tantos vestigios arqueológicos en este tramo no es suficiente”.
Posteriormente, señaló, regresaron el 21 de abril 2022 y mapearon la cueva, a la que llamaron El Escondrijo. Detalló que tienen dos posibles teorías: "que el lugar era un granero para conservar alimento, porque la cueva se mantiene a 26 grados todo el año y la otra posibilidad es lo que llaman escondrijos, para guardar objetos litúrgicos y ceremoniales importantes de las élites”.
“Los arqueólogos sólo están rescatando las piezas que se pueden mover ¿y las que no? como: albarradas, basamentos piramidales habitacionales y/o rituales. La historia que deberían de contar está siendo arrebatada por las prisas de una obra mal planeada”, difundió la especialista.
El INAH se pronunció sobre el “supuesto hallazgo arqueológico en el Tramo 5 del proyecto Tren Maya”, informando que el sitio sí se tiene registrado y se están tomando las medidas para su estudio y preservación.
“Actualmente el INAH, a través de un grupo de arqueólogos especialistas, realiza las tareas de salvamento arqueológico en el Tramo 5, en su fase de prospección. Posteriormente, vendrán las labores científicas de investigación, excavación, protección y conservación que correspondan, las cuales, como se ha hecho en los cuatro tramos iniciales, serán determinadas por expertos en materia arqueológica”, dice el comunicado de prensa difundido.
El instituto solicitó “prudencia y mesura al grupo de personas que hacen sus denuncias a través de redes sociales y que no cuentan con las autorizaciones para llevar a cabo trabajos especializados de salvamento. Si no se toman las medidas previas de investigación y protección, revelar las ubicaciones precisas puede favorecer a actos vandálicos y destrucciones de los monumentos”.
Invitaron a los exploradores de la zona a acercarse de manera formal al INAH, que es la institución del Gobierno de México competente, por ley, para la investigación, conservación, protección y salvaguardia del patrimonio arqueológico y paleontológico de la nación.
Edición: Emilio Gómez
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