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Miguel Améndola
15/07/2024 | Tulum, Quintana Roo
Para este 2024 no se pronostica la presencia de la plaga de arañas y sus telarañas en el bulevar Bahía de Chetumal, como ha ocurrido en años pasados, informó César Raziel Lucio Palacio, técnico académico en el Colegio de la Frontera Sur (Ecosur) y miembro del grupo Interacción, Adaptación y Biodiversidad.
Al dar a conocer las investigaciones sobre este tema que han realizado este 2024, aseguró que este año sería muy difícil que se presente este vistoso fenómeno, ya que primero se necesita que no haya lluvias para que existan estas telarañas grandes que se han presenciado en 2021 y 2023, aunado a que también se necesita que haya una sobreabundancia de alimento por lo menos durante un par de meses.
“Entonces ninguna de esas condiciones ha tenido lugar este año aún y yo no creo que vaya a haber telarañas gigantes en el bulevar”, dijo. Estas telarañas gigantes son parte del ciclo de vida de unas arañas muy particulares que tienen una explosión demográfica cuando hay sobreabundancia de alimento, en este caso de los moscos bobo.
Abundó que las arañas aprovechan esa fuente de alimento, cuando existe, pero al mismo tiempo pueden capturar muchos otros insectos, entre los que destacan los mosquitos transmisores de enfermedades virales. En sentido, señaló que incluso representa un beneficio directo a las personas la presencia de dichas telarañas, ya que controlan poblaciones de algunos insectos que son molestos o peligrosos para la sociedad.
Precisó que este grupo de arañas que teje las telarañas gigantes en Chetumal se llama Tetragnatha y se les conoce con el nombre común de arañas de quelíceros alargados o arañas de colmillos alargados. Ellas no son peligrosas para las personas, solo se alimentan de insectos.
Agregó que este trabajo con las arañas Tetragnatha y los moscos bobos (familia Chironomidae) lo está realizando en conjunto con el doctor Yann Hénaut; “ambos trabajamos en Ecosur y pertenecemos al grupo Interacción, Adaptación y Biodiversidad”.
“Yo pienso que no hay una afectación real, sólo puede haber gente a la que no le gustan las arañas y pues pueda tenerles miedo, pero no hay una afectación negativa real”, dijo. Sobre si el paso del huracán Beryl pudo haber afectado este fenómeno, comentó que este meteoro no tuvo vientos fuertes pero sí lluvias fuertes, lo que evita que las arañas tejan, como en años anteriores.
Sin embargo, el biólogo comentó que lo que pudiera pasar es que si sigue llegando mucha agua del río Hondo o de los escurrimientos de tierra firme hacia la bahía y esa agua arrastra mucha materia orgánica y nutrientes pueda volver a verse moscos bobos en otra época, tal vez hasta finales de año, cuando esté entrando la temporada de nortes.
“Eso se presentará solo si el agua está tranquila durante bastantes semanas, si no hay grandes corrientes, vientos y también si no hay lluvias fuertes, entonces yo no creo que tenga algo que ver el huracán Beryl con la aparición de los moscos bobos, aunque haya gente que diga que antes de un huracán salen estos moscos, de eso no hay nada comprobado”, sentenció.
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Edición: Ana Ordaz