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Ana Ramírez
29/11/2024 | Cancún, Quintana Roo
Nombre científico: Nasua narica nelsoni
Ubicación: Cozumel
Hábitat: Cerca de los manglares, entre la selva mediana y el manglar
Época de reproducción: Primavera
Dieta: Insectos, ramas, hojas, flores y semillas.
También conocido como coatí enano o coatí isleño, el Nasua narica nelsoni es una especie de mamífero endémico de la isla de Cozumel, de la familia de los prociónidos y con características morfológicas diferentes a las de los ejemplares del continente.
Es relativamente más pequeño y genéticamente cambia todo su ADN. La parte importante de este tipo de especies es que deberían generar una conciencia en la comunidad a través de la sensibilización de lo que representan este tipo de organismos para la isla, al ser endémicos, alertó Rafael Chacón Díaz, director de Centro de Conservación y Educación Ambiental de la Fundación de Parques y Museos de Cozumel.
“A lo mejor no todo mundo sabe, pero es una especie endémica de la isla, con características diferentes a las del continente. Y es un grave riesgo el que corren al estar habitando una isla, porque ante cualquier alteración dentro de su hábitat o alguna afectación a su población prácticamente estamos condenándolos a la extinción”, expresó el biólogo.
La principal diferencia física entre los coatíes de la isla y los de la Península es su tamaño; las dimensiones desde la punta de la nariz hasta la cola son mayores en los del continente, entre 40 y 60 centímetros, mientras que los de la ínsula son un poquito más marrones, más pequeños en centímetros y más delgados.
El hocico es una de las principales características: si bien todos lo tienen puntiagudo, el Nasua narica nelsoni lo tiene más delgadito, al ser también primo lejano del mapache. Son especies mamíferos que habitan la isla, que tienen características diferentes y no se encuentran en otra parte más que en Cozumel.
“Genéticamente es una especie que habita aquí, es diferente, ha sufrido especiaciones a través de la vida en la isla y eso genera que sea diferente de sus parientes en el continente”, expuso el entrevistado.
Se reproducen comúnmente en primavera, regularmente dan entre tres y cuatro crías, pero pueden ser hasta ocho. También conviven en manada, por lo que a veces están todas las crías combinadas y son muy familiares, integrados todos.
Habitan directamente cerca de los manglares, entre la selva mediana y el manglar, ubicados principalmente hacia el centro de la isla, hacia la zona de San Gervasio y algunos manchones que están dentro de la costa frente al continente, con congregaciones de familias grandes, numerosas y algunos sitios de hoteles del sur de la ínsula.
Son omnívoros, comen de todo, muy carnívoros, pero se adaptan, desde pequeños pueden comer insectos, ramas, raíces, hojas, flores y ya después buscan semillas, frutos, lagartijas… los que vienen más a la costa oriental son los que se organizan para saquear los nidos de tortuga.
“De hecho hay un dato interesante: los coatíes excavan los nidos y los mapaches esperan tranquilamente a que ellos hagan el trabajo, ellos meten más la nariz y llegan fácil a los huevos y el mapache espera muy tranquilamente a que le tiren lo que ellos sacan, pero sí son animales muy inteligentes y también comparten ecosistemas donde se alimentan, principalmente en esta temporada de tortuga marina”, afirmó Chacón Díaz.
Se trata de especies amenazadas, si bien en los últimos estudios que se han realizado se mantienen como una especie en estado de conservación como preocupación menor, algo que preocupa es la cantidad de ejemplares que aparecen diariamente muertos en la carretera, atropellados por vehículos.
Foto: Luis Guillermo
“No me quiero escuchar muy dramático, pero en realidad los estudios que se van realizando sobre las especies de mamíferos en la isla son de acuerdo a trampeos en sitios y se hacen las estimaciones de la población en los diferentes sitios donde se trampea. Pero durante las actividades diarias podemos ver alrededor de la isla cuatro a cinco coatíes atropellados dentro de los mamíferos que viven en Cozumel y esto es grave”, opinó.
La realidad, dijo, es que todos los animales que habitan Cozumel que están sometidos a una actividad antropogénica están en riesgo diariamente y una de las principales amenazas, es el exceso de velocidad y el cambio de hábitat, cosas que se están modificando dentro de las zonas donde ellos regularmente están alimentándose, que es el manglar y sus alrededores.
El ser humano sigue siendo su principal depredador, por invadir sus sitios de actividad. Son animales de lento desplazamiento y cualquier animal que quiera alimento o refugio va a tratar de localizarlo y las vialidades terminan siendo un cruce obligado de especies y con vehículos a altas velocidades no tienen ninguna oportunidad, sobre todo en una isla cada vez más transitada.
Foto: Tobin Brown
El llamado que emiten los biólogos y ambientalistas tanto a habitantes como a comercios y centros comerciales es que cierren bien sus botes de basura, porque de lo contrario los animales los detectan como una fuente de alimento y acuden a ella aún a costa de su vida.
“Aquí la cuestión es que ellos no deben de comer alimentos procesados y mayormente es lo que hay en ese tipo de sitios, alimentos chatarra o procesados, y se vuelven una amenaza porque son territoriales y no son tan amigables como los mapaches, entonces terminan siendo exterminados”, detalló el biólogo.
Como cada viernes, La Jornada Maya te invita a conocer la fauna endémica del sureste mexicano. Aquí te compartimos la colección que tenemos hasta el momento. ¡Disfrútala!
Edición: Ana Ordaz