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Miguel Améndola
25/01/2025 | Tulum, Quintana Roo
Este viernes 25 de enero se dio a conocer el fallecimiento de Emilia Canché Caamal, quien a sus 110 años de edad se destacó como una de las parteras más longevas de la Península de Yucatán.
La noticia fue compartida por sus propios familiares a través de redes sociales; su deceso deja un vacío entre los habitantes del municipio de José María Morelos, Quintana Roo, donde residió por más de siete décadas.
Doña Emilia nació el 28 de mayo de 1914 en Tekit, Yucatán, y llegó a José María Morelos junto a su esposo, don Augusto Nahuat Soberanis, y sus cinco hijos, cuando la zona estaba prácticamente deshabitada y solo contaba con viviendas de material local como madera y huano.
Allí, en su hogar sencillo y lleno de historia, pasó sus últimos momentos rodeada de sus seres queridos, en una casa construida con las mismas manos que ayudaron a dar vida a varias generaciones de niños morelenses.
Conocida en la región por su habilidad como partera, doña Emilia fue una de las pioneras en la creación del ejido Kilómetro 50, contribuyendo al desarrollo de la comunidad en sus primeros años.
Su conocimiento sobre el arte de la partería lo adquirió de "doña Juana", en Felipe Carrillo Puerto, y lo aplicó en cientos de partos, siempre con la certeza de que ningún bebé había perdido la vida en sus manos. Su servicio, siempre desinteresado, no requería pago, sino que aceptaba con gratitud lo que la familia de los recién nacidos le ofrecía.
A lo largo de su vida, doña Emilia, aunque nunca recibió un reconocimiento oficial, fue considerada por muchos como una de las mujeres más longevas y sabias de la Península de Yucatán, específicamente de Quintana Roo.
En su comunidad su legado perdura no solo por su capacidad de atender partos, sino por su amor y entrega a los demás, especialmente a las familias que acudían a ella en busca de apoyo durante los momentos más cruciales de la vida.
El próximo mes de mayo, Emilia Canché Caamal habría cumplido 111 años.
“Su partida deja una huella imborrable en el corazón de todos aquellos que la conocieron y agradecieron su invaluable servicio. Hoy, la comunidad de José María Morelos llora la partida de una mujer que fue testigo y protagonista del crecimiento de su gente y de su tierra”, se lee en las redes sociales de su familia.
Edición: Fernando Sierra