Yucatán > Sociedad
La Jornada Maya
20/10/2024 | Mérida, Yucatán
Gracias a la solidaridad y el respaldo de las familias meridanas, habitantes de Celestún, Sisal y Progreso que resultaron afectados tras el paso del huracán Milton, recibirán alimentos y otros insumos que les permitirá salir adelante.
La presidenta municipal Cecilia Patrón Laviada envió cargamentos con más de 12 mil 900 víveres y agradeció a las y los ciudadanos por su solidaridad.
Flora Zapata Mendiolea, coordinadora General de Justicia Social y Desarrollo Humano del Ayuntamiento de Mérida, informó que en nueve días, las y los meridanos donaron alimentos, bebidas, insumos de higiene personal y para el hogar, ropa, juguetes, medicamentos y comida para mascotas.
“A quienes vivimos en Mérida nos une la solidaridad y el compromiso de ayudar a las personas. Gracias a quienes hicieron sus donativos, estoy segura que este apoyo le cambiará la vida a las personas que más lo necesitan”, señaló
Acompañada de Carlos Carrillo Paredes, secretario de Participación Ciudadana y del regidor Asís Cano Cetina, entregó los insumos en Celestún, Sisal y Progreso, en representación de la alcaldesa.
“Para Cecilia Patrón es muy importante brindar apoyo oportuno a quienes más lo necesitan, hoy son las y los habitantes de la costa y merecen todo el respaldo para que puedan recuperar su bienestar y tranquilidad. Sabemos que este es un granito de arena, pero unidos podemos más”, indicó.
El centro de acopio abrió sus puertas el pasado 9 de octubre y personal de la Secretaría de Participación Ciudadana apoyó en la recepción y resguardo de los víveres.
El primer punto que visitó la comitiva fue Celestún, donde entregaron un porcentaje de lo recaudado al alcalde Germán Cauich Pinto. Posteriormente, en Hunucmá recibió los insumos la alcaldesa Cristina Pérez Bojórquez. En el puerto de Progreso, la entrega de víveres se realizó el sábado al alcalde Erik Rihani González.
Con estas acciones, desde el Ayuntamiento de Mérida se trabaja en equipo para brindar apoyo oportuno a las familias que lo necesitan sin importar dónde se encuentren.
Edición: Fernando Sierra