Ante un público que abarrotó una de las salas del Centro Cultural Olimpo se llevó a cabo la presentación del libro Mérida, ciudad refugio, que aborda el fenómeno migratorio que vive la capital yucateca. Los comentaristas Hans-Hartwig Blomeier, Abraham Jesús Collí y Claudia Dávila, resaltaron la importancia del trabajo que incluye cifras que muestran un notable incremento en los últimos años.
Foto: Itzel Riqué
Los coautores, Estela Guzmán, Pedro Lewin y Luis Alfonso Ramírez coincidieron en los motivos que los llevaron a realizar la investigación: por una parte es la intensidad, frecuencia y cambios en la movilidad de las personas para radicarse en Mérida, y por otro lado la idea de aproximarse con mayor profundidad y cercanía al documento humano; es decir, a quienes ven y viven la migración: los propios inmigrantes. Es por eso que buena parte de la publicación está dedicada a entrevistas de personas provenientes de otras latitudes, realizadas por Katia Rejón Alejandra Guzmán y Juan de la Gala.
Hans-Hartwig, representante de la Fundación Konrad Adenauer, celebró la publicación física del libro, pues “todavía habemos quienes preferimos leer, tocando el papel” (aunque también se cuenta con la publicación digital) y coincidió con Claudia Dávila en que los datos contenidos en el documento deben dar lugar a la creación de políticas públicas que tomen en cuenta la nueva configuración poblacional de Mérida: 20 por ciento de sus habitantes no nació aquí (más de 180 mil son nacionales y 12 mil extranjeros, hasta el 2020).
Mientras tanto, el coautor Luis Alfonso Ramírez explicó que la confrontación cultural que se experimenta al llegar a vivir a otro lugar, no está necesariamente circunscrita a cierta localidad, ciudad o estado, sino que se trata de un asunto regional, en cuya extensión los grupos sociales construyen sus identidades que, en principio niegan la interrelación con “lo otro”, cuyos rasgos identitarios son diferentes y propuso que en lugar de la negación es necesario el diálogo, la comunicación y la apertura a la otredad.
Claudia Dávila hizo énfasis en que uno de los principales motivos para que gente de otras entidades decida radicar aquí, es que vienen huyendo de la violencia, aunque Mérida se encuentra entre las once ciudades más caras de México.
Con un público variopinto muy participativo, Estela Guzmán y Pedro Lewin agradecieron al Instituto Nacional de Estadística y Geografía, instancia que realizó un estudio especial para contar con datos duros únicos, a los patrocinadores (Fundación Konrad Adenauer) y a las autoridades por haber hecho posible la investigación y publicación de Mérida, ciudad refugio. La socióloga, avecindada en “la Ciudad Blanca” desde hace más de 20 años, culminó la presentación citando a “una sabia persona”: “El ave no es del nido donde nace, es del cielo en el que vuela: ¡mi cielo es yucateco!”