Tania Medina
Foto: Rodrigo Diaz Guzmán
La Jornada Maya
Mérida, Yucatán
Viernes 2 de septiembre, 2016
Padres e hijos de inmigrantes podrán reunirse nuevamente gracias al programa [i]Cabecitas Blancas[/i] que promueve el Instituto para el Desarrollo de la Cultura Maya (Indemaya), que a través de esta iniciativa funge como apoyo en trámites migratorios, con tal de que no existan más casos como el de doña Paulita, quien no veía a su hijo desde hacía 18 años y cuando volvió a encontrarse con él, fue porque se encontraba en un ataúd.
50 personas permanecerán en diferentes puntos de los Estados Unidos durante dos meses, dependiendo del lugar de residencia de sus vástagos, como parte de este programa piloto. El trámite de pasaportes y visas tuvo una duración de aproximadamente dos meses y se tuvieron facilidades por parte del cónsul de Yucatán, David Micó.
El día de hoy partieron hacia Portland, en el estado de Oregon, en donde se llevarán a cabo vaquerías pues, además, viajan acompañados de una orquesta de misiones culturales. San Francisco, California será otro de los destinos. El próximo día 9 se recibirá a otro grupo, el cual estará acompañado por personal del Indemaya, que viaja para apoyar en los trámites migratorios. Se espera que este programa se realice nuevamente para llegar a un mayor número de personas, según indicó Rosario Cetina Amaya, directora del Indemaya
Consuelo Contreras y Evaristo Yamá podrán reunirse nuevamente con su hijo, al cual hace 20 años no ven, desde que reside en los Estados Unidos. Consuelo, quien es oriunda del municipio de Muna, dijo sentirse contenta: “nunca pensamos que este programa nos llevara con él”, menciona.
La pareja vacacionará en el vecino país del norte. Tuvieron que posponer el viaje, ya que la salud don Evaristo es inestable, agregó doña Consuelo. Don Evaristo ya deseaba realizar el viaje, ya que tendrá la oportunidad de conocer a sus nietos, una de las cuales cumple 15 años este sábado.
La Cruz Roja, Bomberos, los Ángeles Verdes y otros grupos de emergencia son parte de la iniciativa
Ana Ramírez
Los pasajeros fueron rescatados; el capitán y un marinero se negaron a abandonar el navío
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Fuertes ráfagas de viento provocaron la caída de la estructura ubicada en el Malecón Tajamar
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La pieza fue fabricada durante el Imperio Bizantino y está muy bien conservada
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