La Jornada Maya
Foto: Archivo
Mérida, Yucatán
Domingo 30 de septiembre, 2018
Al oficiar la misa de domingo en la Catedral de Mérida, el arzobispo Gustavo Rodríguez Vega declaró, durante su homilía, que uno de los desafíos más importantes para el gobernador Mauricio Vila Dosal será la preservación y el cuidado del agua.
Como parte de su homilía, el arzobispo reconoció la labor del ex gobernador Rolando Zapata Bello y deseó que Vila Dosal sea guiado por el Espíritu Santo, y que ponga el agua por encima de cualquier interés económico.
Agradeció a Zapata Bello sus “afanes y desvelos” a favor de Yucatán durante los últimos seis años. Para él, Dios será “su mejor juez y su mejor recompensa”, que sea llevado por Él a través del camino del bien y del servicio a los demás.
Sobre Vila Dosal, expresó que en sus oraciones se encomienda que sea guiado por el Espíritu Santo para buscar el bien común y la justicia, así como el desarrollo integral de todos los habitantes de Yucatán, “particularmente los pobres y marginados”, y conservar la paz tan deseada y difícil de construir para otros lugares de México.
Uno de los desafíos para Vila Dosal, expresó, será el cuidado de la ecología integral y particularmente del agua, un vital líquido. “Por encima de cualquier interés económico está la preservación del agua para nuestra ciudad, para las futuras generaciones y para el mundo entero”, declaró.
“Cuando sólo se busca un rédito económico rápido y fácil, a nadie le interesa la preservación del ecosistema”, reconoció.
Dichas declaraciones ocurren apenas una semana después de que los habitantes de Homún protestaran y clausuraran simbólicamente la granja porcícola que se construye en el municipio, de la que temen contamine los cenotes y el manto freático de la región.
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