Gabriel Graniel Herrera
La Jornada Maya
Ciudad del Carmen, Campeche
Lunes 14 de enero, 2019
En beneficio de los menores con problema de alguna cardiopatía, el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) de [i]Carmen[/i], abrió la ventanilla de inscripción al Programa Internacional de Cardiología [i]Disfrutar la Vida Nos Hace Grandes de Corazón[/i].
Las valoraciones para quienes deseen inscribirse al programa se realizarán el próximo 4 de febrero, en el Hospital General de Especialidades Médicas “Javier Buenfil Osorio”, en la ciudad de Campeche, y las realizarán médicos especialistas. Las inscripciones permanecerán abiertas durante el año.
Viridiana Suárez de Rosas, presidente del DIF municipal, dio a conocer que los requisitos para ser beneficiarios del programa son presentar la valoración realizada por trabajo social y por cardiología, en conjunto con placa de tórax.
El traslado hasta la capital del estado y toda la atención médica que reciba el paciente será completamente gratuita. Sólo deberán acercarse al área médica del DIF Carmen, en calle 35 No. 204, de la colonia Héctor Pérez Martínez, para inscribirse al programa.
Esta medida busca atender y beneficiar a los pacientes en edad pediátrica, desde recién nacidos hasta los 14 años, que presenten cardiopatías como soplo, valvulopatía, arritmias o cardiopatías congénitas.
Los menores serán atendidos por pediatras cardiólogos procedentes del Mercy Medical Center de Iowa, Estados Unidos.
Aquellos menores que requieran seguimiento médico serán atendidos en el Hospital General de Alta Especialidad en Merida, Yucatán.
Viridiana Suárez destacó el interés que se tiene por brindar atención a los menores con cardiopatías, para de esta manera mejorar sus condiciones de vida.
Jueza adscrita al penal estatal de Chalco amplió a octubre la etapa del cierre de investigación
La Jornada
Unos 3 mil productores serán beneficiados con sistemas modernos y eficientes
La Jornada Maya
Robert De Niro recibirá una Palma de Oro honorífica en el evento
Ap / Afp
Amenazó con suspender bienes y salarios a los más de 10 millones de indocumentados
La Jornada