Con las propuestas de impulsar desde el Senado de la República acciones que eviten que los proveedores de Petróleos Mexicanos (Pemex) sean puestos al borde de la quiebra por el impago, así como promover el desarrollo y crecimiento económico del municipio y del estado, la candidata de Movimiento Ciudadano (MC) a senadora, Dulce Dorantes Cervera, inició su campaña en el municipio de Carmen.
Recordó que su compañero de fórmula, Eliseo Fernández Montufar, realizará proselitismo de forma digital. Por su parte, la abanderada emecista afirmó durante su acto de campaña: "Soy una mujer de principios e ideales que como ciudadana quiere cambiar el rumbo del país".
Arranque
El inicio de la campaña tuvo lugar en las oficinas de MC en las inmediaciones del Malecón Costero, en donde fue acompañada de decenas de simpatizantes que, entre porras y cantos, lo recorrieron a ritmo de Batucada y ondeando banderas naranjas.
Acompañada de Daniel Barreda Puga, dirigente estatal de MC y Francisco Farias Bailón, candidato a diputado federal por el II distrito, aseveró que la Federación tiene una gran deuda con Carmen y Campeche, ya que no le han cumplido pese a la aportación de la entidad en hidrocarburos.
"Vamos a construir un gran ejército de cambio, que vele por los proveedores a los que no se les ha pagado, por justicia para Carmen y para Campeche, por un cambio verdadero".
Entérate: Pocos pagos de Pemex a proveedores en Campeche
Campaña
Dorantes Cervera sostuvo que recorrerá la entidad para conocer a raz de suelo las necesidades de los ciudadanos, las cuales se convertirán en iniciativas que serán presentadas en el Senado de la República.
"Somos gente de cambio, no prometemos lo que no se va a cumplir, venimos a comprometernos con la gente, no con los políticos de siempre".
Edición: Fernando Sierra
Durante el hecho falleció otro joven y una mujer resultó lesionada por arma de fuego
La Jornada
Una reserva amenazada por la captura ilegal, la política y el daño ambiental
Rafael Robles de Benito
El sujeto es señalado por el delito de secuestro agravado
La Jornada