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La Jornada Maya
13/07/2025 | México
La antigua ciudad de Caracol ha revelado una vez más uno de sus secretos más extraordinarios: el lugar de descanso final de su primer gobernante, Te K’ab Chaak, descubierto por arqueólogos durante la temporada de campo de enero de 2025.
Este descubrimiento pionero fue realizado por un equipo de investigación de la Universidad de Houston, dirigido por los doctores Arlen y Diane Chase, quienes llevan más de cuatro décadas de trabajo en Caracol. Sus investigaciones de 2025 se llevaron a cabo con un permiso de investigación emitido por el Instituto de Arqueología (IA), parte del Instituto Nacional de Cultura e Historia (NICH), mismo que confirmó el hallazgo, y en estrecha colaboración con arqueólogos del IA.
Foto: University of Houston
La importancia de la tumba de Te K’ab Chaak
De acuerdo con el NICH, Te K’ab Chaak, quien ascendió al trono alrededor del año 331 d. C., es reconocido como el fundador de la dinastía real de Caracol, un linaje político que perduró durante casi cinco siglos. El descubrimiento de su tumba proporciona una valiosa perspectiva sobre los orígenes del gobierno, la diplomacia y el poder en la antigua Belice.
La tumba, descubierta bajo un santuario real en la Acrópolis Noreste de Caracol, estaba ricamente decorada. Entre las ofrendas se encontraban joyas de jadeíta, vasijas de cerámica elaboradamente talladas, tubos de hueso, conchas de spondylus del Pacífico y una máscara mortuoria de jadeíta en mosaico, todos ellos distintivos de los entierros de la élite maya de alto estatus. El equipo también encontró cerámica que representaba deidades, gobernantes y cautivos atados, lo que sugiere temas de autoridad y legitimidad divina.
Foto: University of Houston
Esta es la primera tumba real confirmada excavada en Caracol, a pesar de más de 40 años de trabajo de campo en el sitio. El NICH lo califica como un testimonio de los misterios perdurables que albergan los antiguos paisajes de Belice.
Caracol y el Mundo Mesoamericano
Lo que hace notable este descubrimiento es su contexto más amplio. La evidencia arqueológica e iconográfica del entierro y los hallazgos relacionados sugieren un período de fuerte intercambio cultural e interacción política entre el mundo maya y Teotihuacán, la poderosa ciudad del centro de México, ubicada a más de mil 200 kilómetros de distancia.
Foto: University of Houston
Los artefactos recuperados incluyen navajas de obsidiana verde de Pachuca, puntas de átlatl de estilo teotihuacano y prácticas de cremación al estilo mexicano, lo que demuestra que los primeros gobernantes de Caracol formaban parte de una red diplomática panmesoamericana. El NICH indica que esto rescribe lo que creíamos saber, pus ubica a Belice en el centro de la historia regional, no en la periferia.
“Este hallazgo es uno de los más importantes en la historia reciente”, declaró la doctora Melissa Badillo, directora del IA. “Confirma que Belice ha sido escenario de importantes desarrollos políticos, económicos y culturales que moldearon todo el mundo maya. Y nos recuerda que aún queda mucho por aprender de nuestro patrimonio”.
Foto: University of Houston
El IA anunció que continuará colaborando estrechamente con el equipo de la Universidad de Houston para realizar nuevos análisis de los restos óseos y artefactos, incluyendo pruebas de ADN antiguo, análisis isotópico y la reconstrucción de la máscara de jadeíta. Estos esfuerzos buscan ayudar a reconstruir la historia de vida de Te K’ab Chaak y los inicios de Caracol como superpotencia maya.
Edición: Emilio Gómez