Laura Gómez Flores
A Ana María “N” y Alberto Alfonso “N”, maestra de natación y guardavidas de la alberca del Colegio Williams plantel San Jerónimo, un juez les impuso prisión preventiva por su presunta participación en el delito de homicidio con dolo eventual cometido en contra del menor Abner, estudiante de educación básica, cuya investigación de la Fiscalía General de Justicia continúan para determinar la responsabilidad de otras personas
En la audiencia inicial, el impartidor de justicia calificó de legal su detención, por lo que el Ministerio Público les imputó el delito.
Su defensa, sin embargo, solicitó la duplicidad del término constitucional para determinar su situación jurídica, lo cual sucederá el próximo viernes.
En un mensaje a medios, el coordinador de asesores de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, Ulises Lara López, informó que la maestra fue ingresada al Centro Femenil de Reinserción Social de Santa Martha Acatitla.
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Mientras, el hombre fue trasladado al Reclusorio Preventivo Varonil Sur, siendo puestos a disposición del juez que los requirió y en la audiencia inicial que se llevará a cabo este domingo, el agente del Ministerio Público se revisarán las imágenes minuto a minuto.
De acuerdo con los testimonios de testigos de hecho e identidad y el análisis de videograbaciones, se observa al menor de 6 años en el área de alberca de dicho plantel ubicado en la alcaldía Magdalena Contreras.
Una revisión minuto a minuto de las imágenes permitió registrar la actuación de instructores de natación y guardavidas durante y después de la clase al menor de edad, que inició con un precalentamiento y después recorre la alberca para regresar al punto inicial, señaló.
La maestra, sin embargo, le pide dar otra vuelta; mientras, a las 9:07:50 segundos, el guardavidas abandona su área de trabajo y unos minutos después se observa cuando la maestra le entrega a Abner, que es el primero de la fila, una tabla amarilla.
Unos segundos después se ve al menor sostenerse en los separadores de división de la alberca, cuando la atención de la maestra de natación está enfocada en arrojarles tablas a los niños previamente formados que realizaban clavados.
Ello sin supervisar al menor que estaba en el agua y es hasta minutos después de que se percata que el niño estaba inconsciente, se mete al agua, lo carga y lo lleva al extremo de la alberca, y 10 minutos después de abandonar su área de trabajo, regresa Alfonso “N”.
Posteriormente, acude la médica de la doctora del campo y realiza la reanimación del menor, y se solicita la presencia de paramédicos, quienes llegan al lugar y realizan maniobras de resucitación cardiopulmonar, conocidas como RCP.
El menor es trasladado en una camilla, conectado a un tanque de oxígeno, saliendo de las instalaciones del colegio a bordo de una ambulancia, que lo traslada a un Hospital, donde fallece, lo que se hace del conocimiento a la directora técnica del colegio y, posteriormente, se realiza la notificación del caso al Ministerio Público, según reportó.
Mencionó que todas las actuaciones de la Fiscalía han sido del conocimiento de la familia del menor.
Edición: Estefanía Cardeña
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