Kekén se compromete a aprovechar el 100 por ciento de agua en 2025

Para reducir el impacto ambiental y sumarse al cumplimiento de los objetivos de la Agenda 2030 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la empresa Kekén ha establecido la meta de aprovechar el 100 por ciento del agua que utiliza en las granjas ubicadas en Yucatán. 

El proyecto Meta Descarga Cero 2025 pretende que en los próximos tres años quede establecido un sistema que garantice la reutilización de cada litro de agua invertido para la producción de carne de puerco. 

Miguel Carbajal Rodríguez, director de sustentabilidad de Kekén, explica que la empresa apuesta por una porcicultura sustentable, que en los últimos cinco años ha logrado reducir el consumo de agua en 50 por ciento, comparado con los años anteriores y que el ambicioso objetivo de 2025 se conseguirá con el apoyo de científicos locales, quienes trabajan en descubrir las mejores formas de optimizar el uso del agua. 

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Carbajal Rodríguez explica que Kekén realiza acciones para mitigar el cambio climático, como garantizar el máximo aprovechamiento del recurso hídrico y usar sólo siete por ciento de las hectáreas destinadas a las granjas para permitir que 97 por ciento del terreno permanezca virgen, es decir, con la vegetación y fauna que se encarga del equilibrio ambiental. 

“La mejor forma de secuestrar los gases de efecto invernadero que produce la industria es dejando que la selva trabaje, por eso tenemos amplias áreas de conservación”, explica. 

A pesar de las manifestaciones de algunos pobladores aledaños a las granjas, quienes acusan a Kekén de generar un impacto ambiental negativo, la compañía asegura que lo porcicultura sustentable también se encarga de trabajar a favor de las comunidades. 

Por ejemplo, abona a la generación de empleos en la zona, promueve la apicultura y facilita las herramientas para practicarla; realiza jornadas de salud e involucra a los investigadores locales en el diseño de estrategias amigables con el medio ambiente. 

“Uno de nuestros objetivos es que las comunidades en las que tengamos incidencia se desarrollen a través de talleres que empoderan a los habitantes. Se atiende en especial a las mujeres, para brindarles herramientas que las empoderen y permitan obtener un valor agregado a sus productos”, explica Alicia Núñez, gerente de sustentabilidad de Kekén. 

El camino hacia una descarga cero 

Tres acciones implementadas en todas las granjas de Kekén tienen el objetivo que aprovechar el 100 por ciento del agua: el ahorro, la recirculación y el sistema que garantice que el recurso hídrico pueda ser usado nuevamente en las actividades de la industria. 

En México, la industria autoabastecida ocupa el tercer lugar en uso de agua, sólo después de la agricultura y el abastecimiento público, de acuerdo con cifras del Inegi. Kekén forma parte de este tercer lugar y por ello invierte en un sistema que a corto plazo pueda garantizar menor uso de agua por cada kilo de carne. 

El proceso comienza en enormes biodigestores que funcionan con el uso de bacterias y degradan la materia orgánica (los residuos de los cerdos) para separar los sólidos de los líquidos. 

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Esta actividad a su vez permite que el gas metano que genera la producción de carne se dirija a un motogenerador y se traduzca en el suministro de 20 por ciento de la energía que se usa en la granja. 

Los sólidos obtenidos se separan en lechos de secado, donde se convierten en fertilizantes naturales de bajo costo, mientras que el líquido se destina a las lagunas de tratamiento. 

Por ahora, el proceso culmina en la aplicación de desinfectante al agua para que pueda reutilizarse en sistemas de riego, sin embargo, el objetivo de Kekén es encontrar la forma de garantizar la recirculación del recurso hídrico para las actividades de la granja. 

Serán tres años de trabajo de la mano de especialistas del Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY), universidades locales y otros científicos que puedan aportar soluciones para conseguir la meta de descarga cero.

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